El Gobernador de Zacatecas, David Monreal, acusó a gobernadores de entidades vecinas de «sembrar muertitos» en Zacatecas.
«Gobernadores vecinos quieren exculpar su responsabilidad y ya les gustó Zacatecas como cementerio, porque luego muchos de ellos vienen a sembrar acá sus muertitos», dijo el Gobernador morenista.
Zacatecas vive una convulsa situación de violencia.
Apenas el jueves, 20 personas fueron ejecutadas en distintos hechos. Diez fueron colgadas de un puente en Cuauhtémoc, al sur del estado, en abierto desafío del crimen organizado.
Ante estos hechos, Monreal respondió a los dichos del Gobernador de Durango, el panista José Rosas Aispuro, quien pidió a los duranguenses no viajar de noche a Zacatecas por el peligro que podrían correr.
El Mandatario zacatecano dijo que todos los gobernadores deben enfrentar el problema de la inseguridad.
«Escucho con tristeza estas expresiones tan limitadas de algunos Gobernadores vecinos que quieren exculpar su responsabilidad (…) deberían de hacerse responsables, de manera seria, objetiva, porque no pueden ser tan limitados», dijo.
El informe de Homicidios Dolosos del Grupo Interinstitucional del Gobierno federal establece que el jueves se registraron en todo el País 79 asesinatos, por lo que uno de cada cuatro ocurrió en Zacatecas.
La violencia ya pasó factura al gabinete y el Secretario de Seguridad Pública estatal, Arturo López Bazán, renunció al cargo y fue designado el General brigadier en retiro, Adolfo Marín Marín.
Monreal dijo que pedirá apoyo al Presidente de la República para que «venga a ayudar» ante los hechos criminales, porque es un asunto que compete a la Federación.