El Presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que las relaciones con Austria se han enfriado un poco y hasta puso «sana distancia» con ese país al no prosperar la solicitud de préstamo del penacho de Moctezuma el año pasado.
«Lo que pasa es que se sienten dueños, se apropiaron (los austríacos) de algo que es nuestro. Ya, a partir de ahí, hubo sana distancia. Ya se me pasó el coraje, imagínense lo que significó que nos invadieran, ya pasó mucho tiempo de eso.
«A partir de que no hubo respuesta (a la solicitud) pues no sentimos que ellos estuviesen en condiciones de estrechar más nuestras relaciones; entonces se enfriaron un poco, pero este es el motivo», comentó López Obrador.
En conferencia en Palacio Nacional, el Mandatario federal afirmó que no le cree a las autoridades de Austria, quienes argumentan que no pueden dar a México el penacho porque éste se destruiría en el traslado.
«No (estoy de acuerdo con su posición), porque se cuida, ya hay medios hay tecnológicos para cuidarlo y trasladarlo sin ningún problema. Hay especialistas para este caso, lo que ellos han argumentado es que se deshace, que ya no se puede mover y consideramos que no es válido», expresó.
El Presidente López Obrador no descarta que en un futuro el penacho de Moctezuma vuelva a México, pues aseguró que es propiedad de la Nación.
«Sí, no lo descarto (que vuelva al País). Y debe ser una demanda permanente de los mexicanos, esté quien esté en el Gobierno. Y no sólo el penacho, sino muchísimas otras piezas que se han obtenido de manera ilegal, piezas que están en subastas en otros países.
«Es algo que le pertenece al pueblo de México, es patrimonio nuestro que se sustrajo de manera ilegal», añadió.