Enfrascado en grabar la obra completa de Manuel M. Ponce (1882-1948), el pianista mexicano Rodolfo Ritter ha localizado obras inéditas en el acervo del compositor, resguardado por la familia de su heredero, Carlos Vázquez.
Ritter recibió la invitación de un sobrino del fallecido Vázquez para revisar el archivo, donde aparecieron manuscritos y copias de manuscritos.
«Todavía hay mucho de Ponce», ataja el pianista y compositor sobre el célebre autor zacatecano, de quien se ha vuelto un especialista; ofreció por primera vez un concierto con sus obras muy temprano en su carrera, cuando tenía 15 años.
Ahora graba con el sello holandés Brilliant Classics la integral de Ponce en una colección de ocho discos, y espera publicar al menos los primeros dos álbumes antes del próximo 8 de diciembre, cuando se conmemoren 140 años del nacimiento del padre musical del nacionalismo mexicano.
Ritter, en entrevista, garantiza que cada disco contendrá al menos un par de estrenos.
Hasta ahora ha localizado en el acervo del compositor mazurkas, un nocturno, una tarantela y una obra llamada Estío, y ha puesto ya sus esfuerzos en el rescate y difusión de las obras, un empeño que lo ha acompañado por años.
«Es una batalla vieja y seguirá hasta que todo el mundo lo toque y escuche», asegura el pianista.
Una demostración de su pasión por Ponce será un recital a dos pianos que ofrecerá este sábado junto a su hijo, Roger Ritter, de 19 años, quien estudió en Lausana, Suiza, con Pascal Godart, y quien recientemente ha vuelto a México.
«Y ya está muy solicitado», comparte el orgulloso padre.
El recital tendrá lugar a las 19:00 horas en la Sala Blas Galindo del Centro Nacional de las Artes (Cenart), ubicado en Río Churubusco 79, en la Colonia Country Club.
Será la primera vez, precisa Ritter, que padre e hijo toquen un programa completo juntos.
Se escucharán las dos únicas obras que dejó el compositor zacatecano para dos pianos: Idilio mexicano y Balada mexicana, está última en su reducción a dos pianos.
El concierto intentará abarcar los distintos periodos de Ponce, así como algunas de las obras más queridas por el público, como el Intermezzo No. 1 y la Gavota, además de otras piezas menos conocidas, como la Rapsodia mexicana.
El programa, además, incluye algunas obras modernas, como las Cuatro danzas mexicanas.
«Un compositor colosal e inclasificable», asevera Ritter.