Ana Bárbara nunca se ha visto a sí misma como un ejemplo a seguir, pero sí como una mujer que ha resistido a los embates de los cuestionamientos sociales y de la industria musical. La cantautora celebra que es mujer, profesionista, madre y una figura pública poderosa que ha sobrevivido a las modas.
El domingo 8 de mayo, la potosina celebrará el Día de las Madres con un espectáculo único montado para el Auditorio Nacional, en el que le cantará a las mujeres que considera ejemplares y resilientes.
«Soy, de alguna manera, la representación de una familia reconstruida, una de tantas mujeres que han, o hemos hecho a México, una de tantas mujeres o que están casadas, divorciadas y que formo parte, orgullosamente, de la estadística de que salimos adelante por nuestro trabajo.
«Soy de las mujeres poderosas que hacen a México y por eso busqué una fecha en mayo para el Auditorio. No en junio o septiembre. Aquí celebramos a la madre porque nos las merecemos, porque felicitaremos a las emprendedoras, a las trabajadoras, les cantaré y festejaremos con mucho cariño», dijo Ana Bárbara.
Por si fuera poco, la intérprete echará la casa por la ventana porque conmemorará tres décadas de carrera artística.
«Yo nací para cantar, y muchas veces pensé que no se podía, porque ha habido muchos obstáculos. En el mercado, en la psicología de la música mexicana popular, el 90 son hombres y el 10 por ciento somos mujeres, y no pensé que yo pudiera aguantar.
«A veces me desesperaba y preguntaba: ‘¿por qué no sueno en la radio?’ o: ‘¿por qué esta canción no puede sonar?’ Y cuando sonaba, decía: ‘¡Ay qué lindo!’. Pero era difícil. No pensé en celebrar 30 años, pero me siento feliz con esta conexión que he logrado con el público y que me sigue teniendo presente», dijo la cantante.
Para el espectáculo, anticipó tener distintos popurríes con éxitos como «La Trampa», «Bandido» y «Loca» así como un despliegue de bailarines, escenografía y conceptos visuales de primer nivel para no defraudar a ninguno de los presentes