El Presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, informó este martes que pidió al Papa Francisco actuar como mediador en las negociaciones entre Ucrania y Rusia para poner fin al conflicto armado iniciado por Moscú el pasado 24 de febrero.
En su cuenta de Twitter, el Mandatario informó que habló con Francisco y que le informó sobre la «difícil situación humanitaria» y el bloqueo de los corredores humanitarios por parte de Rusia.
«Apreciaríamos el papel de mediador de la Santa Sede para poner fin al sufrimiento humano», escribió Zelensky, y agradeció las «oraciones por Ucrania y la paz» oficiados por el Papa.
El anuncio del Presidente ucraniano llega en el mismo día en que el Kremlin aseguró que las actuales negociaciones con Ucrania no eran lo suficientemente sustanciales.
«Se lleva a cabo un cierto proceso pero nos gustaría que fuera más enérgico, más sustancial», dijo el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, sobre las conversaciones.
Desde que empezó la ofensiva rusa en Ucrania el Papa Francisco ha reiterado los llamados a la paz al condenar las muertes de civiles.
En una oración pública, el 16 de marzo, pidió perdón a Dios en nombre de los humanos que «continúan bebiendo la sangre de los muertos destrozados por las armas».
Ucrania, un país mayoritariamente ortodoxo, cuenta con una importante minoría greco-católica dependiente del Vaticano, concentrada sobre todo en el oeste del país.
Esta confesión católica de rito oriental, que constituye la tercera Iglesia de Ucrania, afirma que tiene 55 millones de fieles en la ex república soviética, que antes de la guerra tenía unos 40 millones de habitantes.
Cerca del 9 por ciento de los ucranianos afirman pertenecer a esta Iglesia, mientras que el 58 por ciento de la población se reivindica como parte de la Iglesia ortodoxa independiente y un 25 por ciento del Patriarcado de Moscú, según un sondeo de 2021.