En el caso de algunas personas, el café puede estimular los movimientos intestinales además de aportar energía.
CNN En Español
A pesar de su popularidad, no hay muchas investigaciones sobre por qué el café hace que muchas personas salgan corriendo apenas minutos después de tomarlo.
«En algunos casos, como con el café y los movimientos intestinales, es probable que no haya existido una demanda médica suficiente para hacer una investigación seria», explicó por correo electrónico el Dr. Kyle Staller, director del Laboratorio de Motilidad Gastrointestinal del Hospital General de Massachusetts.
«También puede ser un caso de obviedad. Lo que significa que no se necesitan múltiples estudios para saber que el café induce el movimiento intestinal cuando representa una parte tan importante de la vida diaria de muchas personas».
Puede que simplemente el café tenga algo especial, y la investigación que existe prueba que «los pacientes tienen razón», dijo Staller, también profesor asistente de medicina en la Facultad de Medicina de Harvard. Algunos estudios pequeños han demostrado que beber café fue más efectivo que el agua tibia para inducir los movimientos intestinales. Lo que ya implica algo, pues «el agua es una parte integral de la digestión normal y el tracto digestivo libera y reabsorbe grandes cantidades de ella todos los días», añadió Staller.
Por supuesto, esto no significa que la ingesta adecuada de agua no sea esencial para tu salud en general. «Alrededor del 60% de tu cuerpo está hecho de agua», indicó Jerlyn Jones, nutricionista dietista certificada y portavoz de la Academia de Nutrición y Dietética, en un correo electrónico
Ahora bien, si el café es cafeinado o descafeinado no parece tener mucha relevancia en los estudios, según otra investigación. Lo que sugiere que, en algunos casos, los compuestos del café además de la cafeína podrían ser responsables de los movimientos intestinales repentinos.
Las identidades de estos compuestos y cómo podrían interactuar con el tracto digestivo aún se desconocen en gran medida. Pero aquí te dejamos lo que los investigadores han descubierto hasta ahora.
El café podría causar contracciones de colon
El colon experimenta tres tipos de contracciones que trabajan juntas para mezclar, presionar y finalmente expulsar las heces. La aparición, el momento y la frecuencia de estas contracciones reciben la influencia de factores musculares, neurales y químicos.
El café podría estimular esta actividad motora del colon a los pocos minutos de consumirlo, según la limitada investigación disponible, señaló Staller. Doce personas sanas experimentaron esta actividad durante un estudio de 1998, cuando aceptaron que se les insertara una sonda sensora en el colon. Durante un período de 10 horas al día siguiente, los participantes consumieron café caliente, café descafeinado, agua o una comida en orden aleatorio. Ambos tipos de café y una comida causaron más contracciones y presión en el colon, en comparación al agua. El café con cafeína fue un 60% más efectivo que el agua para estimular la actividad motora del colon y un 23% más que el descafeinado.
Varios participantes de otro estudio dijeron que beber café les provocó ganas de ir al baño y luego pasaron por una prueba similar. Su actividad de colon aumentó dentro de los cuatro minutos de beber café negro sin azúcar, un efecto que duró al menos 30 minutos.
Esos resultados probablemente significan que el café no entra en contacto directo con el revestimiento del colon, sino que lo afecta a través de un «reflejo gastrocólico», señaló Staller. Lo que significa que cuando el café entra en contacto «con el revestimiento del estómago desencadena una respuesta del sistema nervioso o una respuesta hormonal que hace que el colon comience la contracción”, dijo. «Las contracciones del colon mueven el excremento en el colon hacia el recto y listo, tienes ganas de ir al baño», añadió.
Las melanoidinas ––compuestos que se forman durante el tostado del café–– tienen fibra dietética, lo que ayuda a la digestión y previene el estreñimiento, dijo Jones.
Podría afectar las hormonas y el ácido estomacal
El café parece estimular también la liberación de la hormona gastrina, dijo Staller, la cual permite la producción de ácido gástrico (ácido estomacal). El ácido gástrico ayuda a digerir los alimentos y puede estimular la actividad colónica. Los investigadores descubrieron en 1986 que beber café con cafeína o descafeinado afectaba los niveles de gastrina de manera rápida y significativa.
Después de ayunar durante la noche, los hombres en un pequeño estudio de 2009 recibieron una comida y un café negro, o solo una comida. Beber café aceleró significativamente el tiempo que tardaba la comida en salir del estómago y entrar en el intestino delgado después de ingerirla.
«Algunos compuestos en el café también podrían interactuar con los receptores opioides en el tracto GI», lo que afecta la función intestinal, agregó Staller.
Lácteos y salud digestiva
Ahora bien, si eres intolerante a la lactosa, pero disfrutas de la crema con un poco de café, esta podría ser la culpable de cualquier impulso repentino de defecar.
«Una forma de averiguar qué te hace ir al baño es tomar café sin crema láctea o sin leche y hacer un seguimiento de sus síntomas durante unos días», dijo Jones.
La investigación sugiere algunos beneficios digestivos de beber café. Pero, ¿debería ser tu café matutino diario lo que uses para mantenerte regular en la deposición? Si está estreñido, no es irrazonable beber café para ayudar a que las cosas se muevan, dijo Staller.
«Pero no confíes únicamente en él para mover los intestinos», dijo Jones. «Habla con tu médico si tienes problemas para ir al baño con regularidad».
Jones recomendó aumentar lentamente la ingesta de fibra dietética «con frutas, verduras, granos integrales, frijoles, nueces y semillas». «El adulto estadounidense promedio consume solo de 12 a 14 gramos de fibra al día y las Pautas Dietéticas para Estadounidenses 2020-2025 recomiendan de 25 a 30 gramos de fibra al día para adultos».
Las personas propensas a tener evacuaciones intestinales blandas o urgentes «pueden querer considerar que el café también puede ser un desencadenante de esos eventos desagradables», dijo Staller.