Justo en el inicio de la temporada vacacional de Semana Santa o «Spring break», cuando las playas de Quintana Roo esperan más de un millón de visitantes nacionales y extranjeros, el sargazo comienza a inundar a este destino turístico.
Como lo estimaron especialistas, una gran mancha de la macroalga, la cual se encontraba hace unas semanas en aguas de Honduras, recaló en las playas de Quintana Roo en estos días.
A un día del banderazo del «Operativo Semana Santa» del Gobierno estatal (este viernes), la Red de Monitoreo de Sargazo localizó en al menos 39 de las 80 playas una acumulación excesiva de la macroalga.
Las afectaciones a bañistas, debido al olor que produce al descomponerse, ha sido visible en playas de Puerto Morelos, Playa del Carmen y Tulum, enfatizó Esteban Amaro, director de la Red.
«Justo está llegando, entró abril y entró el sargazo, como se había dicho a principios de marzo. Habíamos alertado por medio de la página y llegó puntualito. Todavía hay dos manchas, una ya también frente a costas de la entidad y otra al norte de Honduras, que están por arribar, todo abril tendremos sargazo, no dará tregua».
«Los turistas están molestos porque mucha gente planeó sus vacaciones para Semana Santa y está lleno de sargazo, esta cantidad así la vemos luego hasta junio o julio, pero llegó temprano este año, prácticamente se nos adelantó tres meses».
Amaro, quien hasta 2021 participaba en el Consejo Asesor Técnico, en el cual están autoridades locales y federales, así como empresarios, criticó que nuevamente se está reaccionando ya cuando el sargazo está llenando las playas, en lugar de prevenirlo.
«Las barcas sargaceras no han salido a trabajar y el buque ‘Natans’, el más grande, hasta hace una semana la Marina me dijo que estaba en reparación en el astillero de Veracruz», añadió.
«Tienen otra flota de 12 embarcaciones pequeñas, de barcos sargaceros pequeños, pero hasta donde sé de los 12, seis estaban en reparación en Chetumal, en otro astillero, y otros seis me acaban de avisar que los tienen en Mahahual».
Como ocurre desde 2015, a partir del inicio de la primavera inicia el recale masivo de esta macroalga que se alimenta de diversos desechos que son arrojados desde el sur del continente.