No es ningún problema que haya en producción, o ya disponibles, una legión de bioseries sobre artistas.
La cuestión que la industria debería preguntarse es si todas las vidas de las celebridades merecen ser contadas en la pantalla, y si los objetos de análisis permitirán una narración sin compromisos.
Así lo opinó Daniel Krauze, guionista principal de Luis Miguel, La Serie (2018-2021), uno de los proyectos que prendieron la llama en Iberoamérica por el género y que, aseguró, se hizo sin cortapisas ni censura.
“Es complicado el género porque necesitas un artista que esté dispuesto a que se cuente todo, a que no se queden hechos en el tintero. Nosotros tuvimos la fortuna de tener eso. Y por otro lado necesitas una vida, que la bioserie aborde una biografía lo suficientemente interesante.
“No es fácil, porque tienes que tener ese acceso irrestricto, mezclado con una vida que valga la pena contarse. Evidentemente Luis Miguel no es la única celebridad que amerita una bioserie, pero seguramente hay bioseries de artistas o celebridades que no ameritan una. Ni modo. Es el boom que hay y el público elegirá”, opinó el también novelista.
Tan sólo este año, a nivel Iberoamérica, se estrenó El Último Rey, bioserie no autorizada sobre Vicente Fernández; llegará otra oficial sobre “El Charro de Huentitán” y se alista una más sobre Gloria Trevi.
También culminó el rodaje de la que narrará la vida de Miguel Bosé; Lucero admitió recientemente que le interesa explorar el formato.
“Si un artista te pone cortapisas para contar su historia, ¿qué importa el drama entonces? O si te dicen: ‘Sí, puedes contar mi vida, pero tengo que quedar como el ídolo máximo, o ‘no puedes contar esto o lo otro’… así es muy difícil”Daniel KrauzeGuionista
Luis Miguel, La Serie, protagonizada por Diego Boneta y conformada por tres temporadas, la producción de Netflix, que contó triunfos y caídas de uno de los ídolos más herméticos de la música nacional, competirá este domingo en los Premios Platino a Mejor Miniserie y Mejor Interpretación Masculina en Miniserie.
“Todos los reconocimientos se sienten muy padres, una recompensa a un trabajo verdaderamente arduo”.
Al parecer del autor de novelas como “Tenebra” y “Fallas de Origen”, a Luismi, a nivel imagen, la narración audiovisual de su vida lo ayudó a humanizarlo y a quitarle el bronce con que se veía la figura.
“Queríamos que el espectador no sintiera lástima, pero que entendiera que nada ha sido gratis, que ha habido sufrimiento de verdad”.
“Que sus acciones tienen, sino una justificación, sí una explicación. Quien lo criticaba, me parece que ha aprendido a criticarlo menos. Y quien lo tenía en un pedestal, aprendió que el ídolo tenía claroscuros”, compartió sobre las opiniones de internautas al final de la tercera entrega de la serie.
Miembro de una de las familias de intelectuales más respetadas de la región, Krauze está trabajando en otra serie grande de la que, lamentó, aún no puede dar detalles.
Si en su trayectoria ha publicado novelas, su verdadera vocación, aclaró Daniel Krauze, no está en los libros, sino en proyectos cuyo destino sea una pantalla.
“Yo escribí novela porque no conseguía trabajo como guionista, pero mi sueño siempre había sido escribir cine y televisión.
“Le tengo cariño a los libros que he escrito, y espero volver a publicar alguna que otra vez, pero me siento más guionista que novelista”.