Luis Ángel Estrada
El reconocido motociclista originario de Acapulco, Guerrero, y avecindado en Torreón, Coahuila, Jorge Garate Tercero, acompañado de su inseparable amiga de dos ruedas como lo es una moto, está llevando a cabo un recorrido denominado “De Punta a Punta Norteamérica” y que tiene como destino final llegar al lejano y frío Alaska para el mes de junio.
En su paso por la Capital de Acero fue abordado por La Prensa de Coahuila, justamente en el Santuario Guadalupe donde acompañado de varios motociclistas de la ciudad dio sus impresiones acerca de esta aventura que inició el pasado sábado desde la Perla del Pacífico, Mazatlán, Sinaloa.
“Este viaje fue planeado a finales del 2016 e inicios del 2017 junto al legendario profesor Ricardo Aguilera Venegas, con el Profe coincidimos en muchas cosas de la vida, además de que mi papá y él fueron amigos desde la infancia”, relató Garate Tercero en la entrevista llevada a cabo en la explanada del recinto católico de la colonia Guadalupe.
Destacó que el profe Aguilera para él fue más que un maestro, fue un padre debido a todas las enseñanzas y consejos recibidos por el extinto motociclista.
El entrevistado dijo que junto a Aguilera Venegas planeaban varios viajes como ir a Centroamérica y Sudamérica; sin embargo, a él le llamó más la atención el subir lo más alto del continente americano debido a que es más complicado pasar cada frontera de varios países de centro y Sudamérica. “Yo le decía al Profe, vamos a Alaska, vamos a Alaska, lamentablemente se complica la salud de el Profe, y yo le daba ánimos diciéndole que el próximo año nos tocaba Alaska, lamentablemente falleció y no pude realizar ese viaje con él”. Recordando que cada tres meses que venía a Monclova, siempre llegaba con su amigo y hablaban de ese viaje que jamás pudieron realizar juntos. “Ya las últimas veces que vine el Profe me decía que le prometiera que iría a Alaska y yo le decía que sí”.
El plan del acapulqueño antes de realizar una aventura al extranjero era el conocer todo el país, objetivo cumplido en tres ocasiones, por lo que ahora va por el siguiente que está realizando justamente en este tiempo y de esta manera cumplirle la promesa al señor Aguilera, “en el 2019 me faltaba por conocer Yucatán, lo conocí y para el 2020 hacer el viaje a Alaska y cumplirle la promesa a mi Profe”. Lamentablemente llegó la pandemia ese año, extendiéndose en el 2021 y las restricciones para viajar al vecino país se mantenían por lo que fue imposible para el motociclista realizar el viaje, por lo que este 2022 por fin llegó el momento.
Agregó que el mejor tiempo para estar en Alaska son a finales de junio y principios de julio debido a que las temperaturas no son tan bajas, oscilando entre 5 y 10 grados a comparación de que actualmente se encuentran a -13°. Dijo que quiere alargar su estancia en mencionado lugar, conocer de sus bondades y que no sea solo algo breve el viaje, estado de regreso a Torreón para el 15 de julio, lugar donde radica. Aunque aún estaría considerando llegar hasta Cancún debido al nombre de la ruta, por lo que tiene considerado después de estar en Alaska culminar en mencionado lugar mexicano para el mes de agosto.
Dijo que para este fin de semana estaría viajando a Piedras Negras y con ello continuar con su aventura, pero ya en suelo estadounidense.
Comentó que algo que aprendió del Profe es que se debe disfrutar la vida con responsabilidad, por lo que antes de que llegara la pandemia ya tenía la intención de recorrer México a través de su caballo de acero, teniendo en mente hacerlo cuando se jubilara, lamentablemente fallece su abuela en el 2019, el día que falleció él tenía planeado irse a vivir con ella, por lo que se dio cuenta que en esta vida tiene uno que hacer las cosas. Llamando su vida de “seminomada” porque aún regresa a su casa, siendo administrador deportivo y como tal debe de atender sus negocios.
En relación en dónde se queda cuando cae la noche, lo más común son los hoteles, casas de amigos o algún lugar seguro para acampar.
Resaltó que se tiene que respetar la vía por donde transita en este caso las carreteras federales, así como los demás conductores, reconociendo que se encuentra de todo en su trayecto desde conductores amables, así como irresponsables, pero siempre conduciendo con precaución. Por último, dijo que lleva atunes, avenas, café y una estufa portable para preparar sus alimentos.