CIUDAD DE MÉXICO.-Un niño de tres años murió baleado la tarde del jueves en una iglesia de Fresnillo, Zacatecas, víctima del fuego cruzado durante una persecución entre presuntos delincuentes.
El menor acababa de ser confirmado y se encontraba, al igual que otras familias, en el exterior del templo de Guadalupe, en la Avenida Plateros de la zona centro.
Hasta ese punto arribaron sicarios, a bordo de una motocicleta, quienes perseguían a un hombre que intentó resguardarse en el templo, provocando que sus agresores dispararan en el lugar, resultando herido.
Tras los hechos, el pequeño fue trasladado a un hospital; sin embargo, ya no contaba con signos vitales.
Más tarde, decenas de personas acudieron al lugar para colocar veladoras en memoria del menor.
El Fiscal de Zacatecas, Francisco Murillo, condenó ayer el crimen y afirmó que se busca a los responsables.
“Condenamos como Mesa Estatal de Construcción de paz los hechos que acontecieron la tarde de ayer (jueves). Después de las 6:00 se suscitó un hecho en una iglesia de Fresnillo y perdió la vida un menor de edad a consecuencia de disparos de agua de fuego”, indicó el funcionario estatal.
“Desde el jueves se hizo un despliegue operativo de todas las fuerzas de seguridad para encontrar a los responsables”.
Por su parte, el Gobernador de Zacatecas, el morenista David Monreal, aseguró que habrá justicia.
“Lamento y condeno los hechos de violencia presentados el día de ayer (jueves) en Fresnillo, donde un niño de tres años perdió la vida”, escribió en su cuenta de Facebook.
“Mi solidaridad y cariño con sus familiares que en estos momentos atraviesan por un momento doloroso y difícil, al igual que toda la sociedad zacatecana”.
La creciente violencia en Zacatecas se registra aún con el refuerzo de elementos de las Fuerzas Armadas que llegaron a la entidad desde noviembre pasado.