SALTILLO, COAHUILA. – Tras sufrir graves quemaduras de segundo y tercer grado en el cuerpo, cabeza y sobre todo en las vías respiratorias, Federico “N”, de 54 años, perdió la vida en una clínica de la ciudad de Monterrey, Nuevo León, a donde había sido trasladado desde Saltillo para su atención médica.
La madrugada del sábado Federico se hallaba en su domicilio dentro de un condominio de la colonia Herradura III; su vivienda era la del tercer piso del edificio, donde al parecer vivía con su hijo y dos nietos.
Al comenzar a ingerir bebidas embriagantes en compañía de algunos amigos, les pidió buscar en el exterior más bebidas alcohólicas, cuando repentinamente una fuerte explosión sacudió el sector de La Herradura y Nogales.
Debido al incendio que se propagó al interior de su hogar, Federico “N” resultó gravemente lesionado; los vecinos lo socorrieron y lo llevaron a las instalaciones de la Cruz Roja, desde donde lo trasladaron al Hospital General y posteriormente a la clínica 2 del IMSS.
BUSCARON SALVARLO
Se informó que su estado de salud era muy delicado y había el riesgo de que perdiera la vida en Saltillo por la falta de atención de aparatos especiales, así que se decidió llevarlo a la clínica 21 del IMSS en Monterrey, gracias a que la empresa Chrysler para la que laboró por años tenía ese beneficio.
Tras casi tres días internado, este martes perdió la vida en dicha clínica; se informó horas después a la Fiscalía General del Estado de Nuevo León, así como a Saltillo, pues se tenía el expediente de la gravedad de salud por causas violentas.
El cuerpo de Federico “N” sería trasladado por la tardenoche de este martes a Saltillo, en donde sería entregado a su familia para los trámites correspondientes; se informó que le sobreviven un hijo y dos nietos.