El recorte a cinco áreas técnicas del Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM), promovido y aprobado por legisladores morenistas, marca un precedente para otros entes electorales, advirtieron especialistas.
Ayer, el Congreso local avaló la reestructura del Instituto, que implicará la desaparición de las unidades entre las que destacan la de Fiscalización, de Género y Derechos Humanos, y de Vinculación con Organismos Externos.
Bernardino Esparza, experto en Derecho Constitucional y Ciencia Política de la Facultad de Derecho de la Universidad La Salle, aseguró que las acciones contra el organismo implican un daño al sistema democrático, no sólo local, sino del País.
«Sin duda, es un riesgo porque los órganos como el Instituto Electoral de la Ciudad son autónomos y se han creado con una estructura que fortalece varias áreas de la democracia del País.
«Es una desproporción este tipo de iniciativas y trastocan la democracia (…) se abre un boquete y después va para arriba y piensan: ‘ya lo logramos en este instituto local en la Ciudad de México y vamos con otros estados o, quizá, con el Instituto Nacional Electoral'», advirtió.
Martha Tagle, integrante de Mujeres en Plural, destacó que, con la aprobación, se manda un mensaje a estados con congresos dominados por Morena, pues se abre la puerta a adelgazar otros institutos.
«Como están previendo que no les aprueben la reforma constitucional, enviada por el Presidente en materia electoral, porque ya lo sintieron con la reforma eléctrica al no tener los votos, pues empezarán a hacer este tipo de reformas para desmantelar a las instituciones electorales en los estados en donde tienen mayoría en los Congresos», subrayó Tagle.
En tanto, consejeros del IECM expusieron que están obligados a acatar la reestructura, aunque ya evalúan los mecanismos para impugnar la decisión aprobada por el Legislativo.
«Tenemos que verificar cómo quedó la última versión de este dictamen aprobado, con sus artículos transitorios, con base en eso tendríamos que hacer un plan de trabajo y una revisión integral de la estructura», indicó el consejero Ernesto Ramos en conferencia.
«Estamos obligados a aplicar esa norma en la realidad y hacernos responsables de las consecuencias, eso nos corresponde a nosotros, por lo tanto, tememos que tomar decisiones muy cuidadas».