A pesar del plan del Gobierno para homologar los precios en ciertos productos básicos, especialistas en economía del sector privado consultados por el Banco de México (Banxico) durante mayo elevaron su expectativa de inflación anual de 6.75 a 6.81 por ciento para cierre de año, su décima revisión al alza consecutiva.
Mientras que la expectativa de inflación general mensual subió de 0.02 a 0.11 por ciento en mayo y la del índice subyacente de 0.45 a 0.54 por ciento.
El 4 de mayo, Gobierno federal y empresarios acordaron el Paquete Contra la Inflación y la Carestía para homologar el precio de 24 artículos de la canasta básica a nivel nacional para los siguientes seis meses.
En su momento, Tatiana Clouthier, Secretaria de Economía, afirmó que los efectos del plan se verían a corto plazo, pero diversas instituciones y economistas señalaron que éstos serán limitados y no funcionarán de inmediato.
«Estaríamos diciendo que empezaría a verse los efectos entre 15 días y un mes para que pueda a empezar a surtir efectos de forma integral», señaló la Secretaria en su momento.
Además, los analistas también aumentaron su expectativa para la inflación subyacente anual de 6 a 6.38 por ciento al cierre de 2022. Este índice se considera un mejor parámetro para medir la trayectoria de los precios y determina la tendencia de la inflación a largo plazo.
Para 2023 se incrementaron las expectativas para la inflación general anual de 4.13 a 4.34 por ciento y para el índice subyacente de 4 a 4.14 por ciento.
También subieron las expectativas promedio de inflación para el largo plazo. De uno a cuatro años se elevó de 3.77 a 3.79 por ciento en la inflación general y de 3.71 a 3.74 por ciento en la subyacente.
De cinco a ocho años, el promedio para la general se mantuvo sin cambio, en 3.62 por ciento, al tiempo que para la subyacente subió de 3.57 a 3.59 por ciento.
Ante las correcciones al alza en todos los pronósticos de inflación, ahora se estima que Banxico cierre el año con una tasa de referencia de 8.75 por ciento, 50 puntos base más que la proyección de abril. Actualmente, la tasa del banco central se ubica en 7 por ciento.
Respecto al crecimiento económico, la expectativa del PIB subió ligeramente de 1.72 a 1.80 para 2022 mientras que para el siguiente año se mantuvo en 2 por ciento.
Los especialistas consideran que, a nivel general, los principales factores que podrían obstaculizar el crecimiento económico de México en los próximos seis meses se asocian con la gobernanza (41 por ciento), las condiciones económicas internas (20 por ciento) y la inflación (20 por ciento).
A nivel particular, los principales factores son: la incertidumbre política interna; los problemas de inseguridad pública; y las presiones inflacionarias en el País, todas con el 14 por ciento de las respuestas.
Dicha encuesta fue recabada por Banxico entre 37 grupos de análisis y consultoría económica del sector privado nacional y extranjero. Las respuestas se recibieron entre los días 24 y 30 de mayo.