El gasto programable del sector público tuvo una caída anual de 2.6 por ciento en los primeros cuatro meses de 2022, lo que no ocurría desde hace tres años, debido principalmente a una menor inversión física.
De enero a abril, este gasto fue de un billón 683 mil millones de pesos, de acuerdo con cifras al cierre de abril de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
Desde el 2019 no se registraba una caída para un mismo periodo en el gasto programable, que incluye todos los desembolsos que realiza el Gobierno federal para entregar bienes y servicios a la población, financiar programas sociales, entre otras cosas.
La reducción en lo que va de este año obedeció, en parte, a que la inversión física -aquella enfocada a construir, conservar o adquirir bienes de capital para la obra pública tanto directa como indirecta- reportó un descenso anual de 0.6 por ciento con un monto ejercido de 222 mil 610 millones de pesos.
También tuvo que ver un menor gasto ejercido en materiales y suministros, que reportó una reducción anual de 27.4 por ciento al sumar 101 mil 597 millones de pesos.
Lo anterior se sumó a la caída anual del 4.7 por ciento en el gasto programable en servicios personales que ascendió a 497 mil 999 millones de pesos, de acuerdo con los datos de la SHCP.
«Vemos recortes por un asunto de austeridad en el Gobierno federal que se reflejarán este año y el siguiente, así como programas de inversión física y apoyos que no están arrancando como se esperaba», dijo Artemisa Monteses, especialista en Economía de la Facultad de Negocios de la Universidad La Salle.
Sostuvo que entre ellos se encuentra el Programa para el Bienestar de las Personas con Discapacidad, cuyo registro de personas beneficiadas apenas está iniciando en varios estados.
«En la Ciudad de México apenas esta semana está arrancando el registro, eso quiere decir que esos programas no ejercieron recursos en la primera mitad del año», señaló Artemisa Monteses.
De acuerdo con un análisis de México Evalúa, al cierre de marzo pasado, se registraron 22 programas de subsidios que no habían recibido recursos de los que tenían asignados para el ejercicio de este año, entre ellos está el de Atención a la Salud del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi).
Por dependencias federales, las Secretarías de Educación Pública y la de Salud estuvieron entre las que reportaron reducciones importantes.
Estas caídas de doble dígito fueron de 23.6 por ciento y 16.2 por ciento en este gasto programable, respectivamente, según las cifras de la Secretaría de Hacienda.