El proyecto para construir un puente vehicular de 8.8 kilómetros sobre la Laguna Nichupté y conectar el centro de Cancún con la zona hotelera ya se vio impactado por el aumento de precios en el sector.
Debido a que las ofertas excedieron el presupuesto autorizado, el pasado 7 de junio la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) declaró desierta la licitación para el puente, el proyecto vial más importante de las últimas décadas en Cancún.
En marzo pasado, la SICT había estimado en 5 mil 580 millones de pesos el costo del puente de tres carriles y andador peatonal.
Pero de las seis ofertas que recibió, cinco rebasaron ese monto, incluidas cuatro por más de 7 mil millones de pesos, mientras que la única inferior, de Grupo INDI, fue descalificada por deficiencias técnicas.
El Puente Nichupté había sido planteado en 2020 como una Asociación Publico Privada (APP) en la que el Gobierno federal aportaría 39.8 por ciento del dinero, mientras que el resto sería inversión privada con una parte del Gobierno estatal, pero el esquema se canceló por orden federal en agosto de 2020.