Fabiola Sánchez
Las autoridades de Nuevo León, buscan deslindarse de responsabilidades y escoltan a cientos de migrantes hasta la salida, para que continúen su trayecto por Coahuila, obligado a las autoridades de este Estado dar frente a la atención a este éxodo de indocumentados.
Desde el pasado 6 de junio, se informó había arribado al Estado de Chiapas, una inmensa caravana de más de 15 mil migrantes, en su mayoría venezolanos, su objetivo es llegar a la frontera de Estados Unidos.
Miles de indocumentados, lograron salir de ese Estado, a bordo de autobuses y comenzaron a llegar a la capital de Coahuila y Nuevo León, de donde han tenido que continuar su trayecto de manera pedestre.
En el Estado de Nuevo León, el pasado miércoles, arribó un contingente de más de mil 500 indocumentados y estos formaron grupos para salir poco a poco, algunos de ellos a bordo de autobuses, que los trasladan solo hasta los límites de Coahuila, donde los abandonan a su suerte.
Además, a quienes no logran conseguir su pasaje en autobús, la Policía Civil, Protección Civil y Policías Municipales, se encargaron de escoltar hasta los límites de este Estado para deshacerse pronto de ellos, y evitar sigan en Nuevo León.