ZACATECAS, Zacatecas.-El obispo de Zacatecas, Sigifredo Noriega Barceló, denunció que fue interceptado en un retén del crimen organizado en Jalisco, cuando iba a visitar comunidades pertenecientes a su Diócesis.
«Íbamos de Huejuquilla a Tenzompa (en el noroeste de Jalisco), pero lo que me llamó la atención es que no era ni Guardia Nacional ni Ejército (en el retén). Eran personas de uno de los grupos delictivos, ellos estaban haciendo lo suyo pues, no dejando pasar a otros grupos», señaló en declaraciones a medios locales.
«Es la primera vez que me toca en vivo un suceso como ese».
La retención ocurrió el pasado jueves, cuatro días después de que en Chihuahua fueron asesinados dos sacerdotes jesuitas y un guía de turistas a manos del líder criminal José Noriel Portillo, alias «El Chueco», vinculado al Cártel de Sinaloa.
«Está el miedo presente, tomamos las medidas que todo el mundo toma, no hay ninguna protección en especial. (Ahora) es cuando más te necesita la gente que estés cerca, pero debes poner tus medidas adecuadas para que puedas servir mejor. Yo no quiero mártires», señaló Noriega Barceló.
En su cuenta de Facebook, el obispo publicó la noche del jueves unas fotografías sobre su visita a Tenzompa.
«Debemos permanecer en el amor de Dios. Los consejos parroquiales deben orientar y ayudar a construir un mejor ambiente en la vida de cada día. Que seamos capaces de construir la paz», apuntó.
En junio de 2021, el sacerdote Juan Antonio Orozco Alvarado falleció en un fuego cruzado entre el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) cuando viajaba en un tramo carretero entre Mezquital, Durango, colindante con Zacatecas y Nayarit.