Cientos de litros de aguas negras se desbordan en calles del Centro Histórico de la Ciudad de México sin que autoridades atiendan el problema del drenaje.
Locatarios de San Jerónimo refieren que el problema ha estado presente desde al menos hace cinco años, pero en lo que va de 2022 se ha intensificado.
Melissa es propietaria de una hostería en la calle que se ubica en el Perímetro A del Centro Histórico. Ella es una de las afectadas por el desbordamiento del drenaje
“Tiene todo lo que va del año que está completamente fuera de control, sin que hayamos recibido respuesta para ello”, enfatizó.
“Esto es un problema de salud pública porque cuando decimos: ‘se desbordan aguas negras’ es la manera políticamente correcta de decirlo, pero en las aguas negras viene todo tipo de materia en descomposición, materia fecal, es un foco de infecciones, huele mal y tiene presencia de bacterias”.
El problema se arrastra, al menos, desde 2017. En aquel entonces los comerciantes debían esperar a que las autoridades acudieran a desazolvar. Posteriormente, optaron por contratar maquinaria externa que les costaban hasta 2 mil pesos por semana, así que compraron su propio equipo para realizar la limpieza.
Actualmente la medida ha sido insuficiente.
Los locatarios aseguran que el Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex) reconoció que el riesgo de desbordamientos y afectaciones va en aumento, sin que hasta el momento la dependencia lo haya atendido.
En tanto, la Alcaldía Cuauhtémoc y la Autoridad del Centro Histórico se acusan entre sí de tener la responsabilidad.
“Ya no importa qué tanto hagan nuestros trabajadores a los que les pagamos, aparte, por desazolvar, ya no baja más porque es un problema mayor del Centro Histórico y, cuando llueve, el problema es peor porque se satura el sistema de drenaje y se desborda completamente, no hay nadie, absolutamente nadie, que nos ayude en esto, todas las instancias involucradas se lavan las manos”, reprochó Melissa.
Tan sólo en el último mes han realizado más de 25 reportes.
“Hasta nos dijeron que no solamente era pertinente atender las inundaciones y desbordes, sino que estábamos como foco rojo, que estábamos en emergencia.
“Pero ahora que volvimos a llamar, dijeron que siempre no les corresponde a ellos, y la Alcaldía Cuauhtémoc respondió que teníamos que ir con el Sacmex, todos se lavan las manos”, narró.
Antonio es otro de los comerciantes afectados.
Enfatizó en que pesar de que ha cumplido con los requisitos y pagos para operar, lo único que recibe es un servicio deficiente.
“Uno renta un inmueble, se pagan impuestos, enseres, luz, renta, todo lo que el Gobierno dice, pero el Gobierno regresa aguas negras”, aseguró.
