Supera a usuarios de Netflix
Excelsior
La industria tradicional de contenidos audiovisuales en América Latina enfrenta una sobrerregulación que no sólo la pone en desventaja frente a las nuevas plataformas digitales, sino que a la competencia se ha sumado la piratería de contenidos en línea que ya supera el número de suscriptores que Netflix tiene en la región, generando pérdidas anuales por cinco mil millones de dólares anuales, explicó Maryleana Méndez, secretaria general de la Asociación Interamericana de Empresas de Telecomunicaciones (ASIET) y Gonzalo Martínez Pous, director general jurídico regulatorio de Grupo Televisa.
Al participar en la tercera mesa de Diálogos sobre la Transformación Digital en México, que organiza el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), Méndez explicó que las plataformas ilegales se aprovechan todos los espacios, incluso de las apps, redes sociales, los chats y a los influencers, para la distribución y promoción de contenido no legales, con toda la problemática que se genera a la cadena de valor.
La experta de la Asiet comentó que, “en el caso de México, en particular, la forma de consumo más común es el streaming ilegal”, y que aún dentro de las tiendas legales hay apps que llevan al contenido ilegal. También se pueden ver en las búsquedas de contenidos en donde más de 46% de los URLs o direcciones que aparecen en la primera página que los usuarios consultan son servicios ilegales.
En redes social, 29% de los hosteos analizados llevan a contenidos ilegales, en donde destaca el IPTV seguido por películas y, en menor proporción los eventos de transmisión en vivo.
Sí la industria cultural necesita impulso para la generación de contenidos propios, la piratería de contenidos va en sentido contrario. Según el Centro Estudios del Asiet, la piratería en la región provoca pérdidas potenciales anuales mayores a cinco mil millones de dólares anuales y lo que significa fuerte pérdida de recursos para autoridades fiscales, por lo que frenar este consumo representa un alza para la industria y para la generación de empleo”.
ALERTAS
Mendez agregó que muchos usuarios se suscriben de buena fe, sin considerar que con ello arriesgan la calidad del contenido que reciben, sus datos y la información almacenada en sus dispositivos, además de que generan violaciones a los derechos de la protección de los derechos de autor.
Pero incluso en market places en México, en 15% de las ofertas analizadas se observó que conducen a servicios y contenidos piratas.
La experta observó que los proveedores tradicionales de contenidos audiovisuales enfrentan una serie de cargas específicas en las que se nota una importante diferencia.
Martínez Pous destacó que la televisión tradicional en México tiene que enfrentar el pago de la contraprestación, en una sola exhibición, por derecho de uso del espectro; Impuesto Sobre la Renta, tiempos fiscales y del Estado, entre otros que no se cargan a las plataformas digitales, por lo que es necesaria una desregulación y poner piso parejo.
Observó que de 2013 a la fecha la industria de contenidos audiovisuales ha tenido importantes cambios en sus modelos de negocio, lo que implica la reconfiguración de la cadena de valor, la llegada de nuevos jugadores; la multiprogramación gracias a la cual en el país se pasó de 300 a mil 400 canales de televisión abierta, así como 250 estaciones de radio adicionales.
Martínez retomó estimaciones de Sonia Agnes, analista de Omdia Latinoamérica, en el sentido de que en dos años más los servicios de streaming superarán a los de la televisión de paga.