“Hagan algo”, instruyó el productor Gene Redd al baterista George Brown y al bajista Robert “Kool” Bell durante una de sus primeras sesiones de grabación en Nueva York. “¡Digan algo! Canten algo”.
Esa orden a finales de los 60 fue lo que Kool & the Gang -un grupo de jazz que evolucionó hacia el funk y luego hizo la transición a la música disco- necesitaba para comenzar su camino musical.
“Sin pensarlo”, dijo Brown, de 73 años, sobre los primeros años del grupo, cuando hacía temas instrumentales, “empezábamos, y listo, ahí estaban: ‘Raw Hamburger’ y ‘Chocolate Buttermilk'”, añadió, refiriéndose a dos temas memorables.
A lo largo de casi seis décadas, Kool & the Gang ha lanzado 25 álbumes. Sus 12 sencillos en el Top 10 son clásicos del funk, la música disco y el pop, además han sido utilizados en películas como Tiempos Violentos y Legalmente Rubia: “Jungle Boogie“, “Ladies Night“, “Celebration“.
Aun así, la banda no ha recibido los mismos reconocimientos que muchos de sus contemporáneos. Ni siquiera ha entrado en la lista de candidatos al Salón de la Fama del Rock & Roll. ¿Por qué?
“Nos preguntamos lo mismo”, afirmó Bell, de 71 años, en otra entrevista. El bajista y cantante se unió a la primera versión del grupo, en 1964.
Hace unos días salió a la venta un nuevo box set, The Albums Vol. 1: 1970-1978, que demuestra la influencia de la banda: 199 temas en 13 CDs, que celebran un periodo de transición que llevaría al grupo al borde del megaestrellato.
Bell goza de recordar los primeros días de la agrupación en Ohio, cuando él y su hermano Ronald Khalis Bell golpeaban latas de pintura vacías para hacer ritmos.
Su padre, Bobby, era un boxeador que conocía a Miles Davis y Thelonious Monk. Robert probó el boxeo, pero sólo duró un año. Cuando la familia se trasladó a Jersey City, él se unió a pandillas locales.
La música fue lo que lo sacó de allí: el grupo surgió cuando Ronald visitó la casa de un compañero de la escuela, Robert “Spike” Mickens, que podía tocar impecablemente el clásico de jazz “Desafinado”. Los hermanos Bell pronto se convirtieron en visitantes asiduos de la casa de Mickens y “Kool” tomó una guitarra.
Formaron los Jazz Birds, luego los Jazziacs, y después Kool and the Flames. En 1969, queriendo evitar problemas con JamesBrown and His Famous Flames, pasaron a llamarse Kool & the Gang.
El grupo halló un mánager y comenzó a dar shows, acompañando a estrellas menores de R&B en sus conciertos. “Fue cuando se unieron el jazz y el funk”, dijo Bell. Su álbum debut, Kool and the Gang de 1970, reflejaba esta combinación.
Durante la mayor parte del periodo inicial de la banda, Kool & the Gang no tenía realmente un vocalista, y por un rato, no importó. Cuando un ejecutivo les pidió que hicieran su propia versión de “Soul Makossa”, el grupo ideó “Jungle Boogie”, “Funky Stuff” y “Hollywood Swinging” durante una sesión de ensayos en Nueva York para su álbum WildandPeaceful.
A finales de los 70, la agrupación había sobrevivido lo suficiente como para darse cuenta de que podía ser aún más grande si encontraba a un cantante principal. El promotor de conciertos Dick Griffey fue el primero en sugerir la idea, y el grupo contrató a James “JT” Taylor.
Un pequeño detalle al final de “Ladies Night” resultó ser crucial: Meekaaeel Muhammad, miembro del equipo de compositores, completó el estribillo con un: “Come on, let’s celebrate”. Eso condujo al siguiente éxito de la banda.
“Celebration” es una de las canciones más reconocibles del pop. El tema marcó el inicio de un periodo de grandes éxitos en los 80 (“Get Down On It”, “Cherish”, “Fresh”), pero después de tantos años de trayectoria, la música disco y el pop se volvieron “un poco aburridos, si sabes a qué me refiero”, dijo Brown.
La era de éxitos terminó alrededor de 1989, y el grupo siguió grabando discos durante las décadas posteriores, sustituyendo a los miembros originales por otros más jóvenes. En 2011, DavidLeeRoth vio a Kool & the Gang actuar en Glastonbury e invitó a la banda a ser telonera de Van Halen.
Pero los últimos años han sido difíciles. Ronald Khalis Bell y el saxofonista Dennis “Dee Tee” Thomas murieron; Robert Bell perdió a su esposa y a otro hermano. Cuando llegó la pandemia, los miembros restantes del grupo tuvieron que interrumpir sus conciertos. Al hablar de este periodo, la sonrisa de Bell se desvanece y él se vuelve contemplativo. “Muchos recuerdos”, dijo. “Pero seguimos adelante”.
Brown afirmó que un nuevo álbum está programado para octubre, y la banda ya está de gira una vez más.
Quizá también llegue al Salón de la Fama del Rock & Roll. Bell sonrió con ironía. “Sí, bueno”, dijo. “Quizá el año que viene”.