El comité de la Cámara Baja de Estados Unidos que investiga el ataque del 6 de enero en el Capitolio volvió al horario de máxima audiencia para acusar al ex Presidente Donald Trump de negligencia en el cumplimiento del deber por no haber rechazado el asalto perpetrado en su nombre.
Según un miembro de la comisión, durante la insurrección, el entonces Mandatario permaneció en el comedor de la Casa Blanca, frente a un televisor sintonizado en Fox News, por más de dos horas y media.
“Durante 187 minutos el 6 de enero, este hombre de energía destructiva desenfrenada no pudo ser convencido de actuar“, dijo en referencia a Trump, el representante Bennie Thompson, demócrata de Mississippi y presidente del cómite.
“Ni por sus ayudantes, ni por sus aliados, ni por la violencia de los alborotadores, ni por las desesperadas súplicas de los que se enfrentaban a la multitud. No se inmutó“.
Thompson añadió que los implicados del ataque del 6 de enero deben responder ante la ley.
“Trump abrió imprudentemente un camino de anarquía y corrupción”, indicó.
“Mintió, intimidó, traicionó su juramento”.
La inacción del ex Presidente fue remarcada con más evidencia en otras momentos de la audiencia, que dirigieron dos veteranos militares, la representante Elaine Luria, demócrata de Virginia, y el representante Adam Kinzinger, republicano de Illinois.
Luria subrayó que no hay registro oficial de que Trump haya hecho o recibido una llamada durante toda la tarde, y no hay fotos de él hasta que apareció en el Rose Garden después de las 16:00 horas para dar un mensaje.
En ese discurso, el entonces Mandatario pidió a los manifestantes que se retiraran de la sede legislativa, pero el comité reveló que el republicano cambió el guion de último momento.
“Te pido que abandones la región de Capitol Hill, ahora, y te vayas a casa de manera pacífica”, decía el discurso preliminar.
Pero Trump en realidad no dijo eso. En cambio, repitió afirmaciones infundadas de fraude electoral sin condenar la violencia de sus partidarios en Washington.
“Conozco su pena, conozco su dolor. Esta elección nos fue robada. Pero hay que volver a casa ahora. Los amamos, son únicos”, enfatizó en el mensaje que sí dio.
El comité mostró mensajes de texto entre Donald Trump Jr. y Mark Meadows, el jefe de gabinete de la Casa Blanca, mientras se desarrollaban los disturbios en el Capitolio, para mostrar que hubo presión sobre el entonces Mandatario para que tomara medidas para detener la violencia.
El hijo del republicano imploró a Meadows que hiciera que su padre actuara para ayudar a preservar su legado.
Sarah Matthews, subsecretaria de prensa, dijo al comité que estaba aliviada de que Trump finalmente les dijera a sus seguidores que se fueran a casa, pero también estaba consternada porque había repetido la “mentira” de que las elecciones fueron robadas.
“Para mí, su negativa a actuar y calmar a la turba ese día y su negativa a condenar la violencia fue indefendible”, remarcó.
Matthews, quien decidió renunciar el día de la insurrección, agregó que el entonces Mandatario podría haber llegado en “menos de 60 segundos” a la sala de reuniones, donde siempre hay una cámara encendida para dar mensajes.
El comité mostró también un nuevo video de los líderes del Senado presionando a los militares para que despejaran el Capitolio para que pudieran renovar el conteo de votos electorales. El Presidente de Estados Unidos no se veía por ninguna parte.
E incluso el 7 de enero, después del ataque al Capitolio, Trump no pudo admitir que había perdido la carrera presidencial.
“No quiero decir que las elecciones terminaron”, afirmó Trump en tomas descartadas de un video que filmaron ese día con la intención de censurar la violencia.
Aunque se esperaba que la audiencia de esta noche fuera la culminación de las realizadas durante los últimos dos meses, Thompson, el presidente del comité, aseguró que el panel planea volver a reunirse para más sesiones en septiembre mientras continúa su investigación y trabaja para publicar un informe preliminar.
