Esperanza L. González
El menor de dos años de edad que ingresó grave el pasado miércoles al Hospital Amparo Pape de Benavides tras caer de la altura de un sillón en su domicilio, fue declarado con muerte cerebral.
El accidente le ocasionó al pequeño un hematoma en el cerebro que lamentablemente sobrevino en su desahucio, por lo que la familia fue informada ayer por el médico pediatra que la lesión es irreversible.
Ángel García Rodríguez, director del Hospital Amparo Pape de Benavides mencionó que el niño se encuentra en terapia intensiva pero sus signos vitales están bajando por lo que lamentablemente es cuestión de horas o días en que su corazón deje de latir.
Detalló que por ahora el niño está con una muerte encefálica en donde los reflejos están totalmente abatidos y respirando con el apoyo de un ventilador mecánico sin el cual no tuviera ningún signo de vida.
“Está bajando de forma muy importante la frecuencia cardiaca, llegó con 120 pulsaciones por minuto ahorita trae 56, a esa edad se le considera una bradicardia, y poco a poco irá bajando sus signos vitales”.
“La familia ya está enterada, nosotros no tenemos día ni hora para determinar cuándo puede terminar la vida de una persona, pero si está bajando de forma considerables sus signos vitales, pero aun así puede pasar horas, días, en lo que esto termine”, comentó.
Mencionó que la familia consiguió Seguro Social para trasladar al niño pero al conocer el panorama se decidió que continuará en este hospital pues desafortunadamente el daño es irreversible y no existe oportunidad de salvarle la vida por tratarse de una muerte encefálica.
De acuerdo con lo declarado por los padres, el menor cayo desde la altura de un sillón en su domicilio, por lo que ahora será la Procuraduría de los Niños, Niñas y la Familia la que lleve a cabo la investigación en cuanto a su entorno familiar, mientras que la Fiscalía General del Estado investiga las causas del accidente.
“Están dentro de la etapa del duelo, hay que ser muy sensibles para tratar el tema con ellos, pero desafortunadamente ante este tipo de situaciones médicas, la medicina queda inoperante, los papás, la abuelita materna están consternados”, comentó.