Los hechos alrededor del día en que Vincent van Gogh recibió una herida en el pecho permanece como uno de los grandes enigmas de su vida.
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El 27 de julio de 1890, en un campo cercano a Auvers, Francia, el pintor neerlandés Vincent van Gogh recibió una herida mortal en el pecho causada por un revólver. Dos días después, murió en la pensión en la que vivía. Su hermano Theo estuvo a su lado cuando expiró. ¿El pintor decidió dispararse a sí mismo o fue víctima de un accidente o ataque?
El pintor solía escribirse a menudo con Theo. Sus cartas dejan entrever que mentalmente existía una gran inestabilidad en él: “My life, is attacked at the very root, my step also is faltering”. (“Mi vida, es atacada de raíz, mi paso también se tambalea”).
Vincent estaba agotado por el trabajo duro y el alto nivel de exigencia que se imponía a sí mismo. No tenía claro el futuro y sentía que había fracasado, como hombre y artista.
Muchos historiadores dan por hecho que Van Gogh se suicidó, aunque también existen teorías que apuntan a que otra persona le disparó. ¿Cómo fueron las horas previas al momento en que el pintor recibió el impacto del fatídico revólver Lefaucheux?
Pintor incansable hasta su último día
El investigador Wouter van der Veen, director del Instituto Van Gogh, descubrió el lugar exacto donde Van Gogh creó su último cuadro, Tree Roots (Las raíces del árbol, 1890). Incluso el Museo Van Gogh de Ámsterdam reconoció que el hallazgo es exacto.
Con esta pieza vital del rompecabezas, los expertos pueden conjeturar que Van Gogh pasó todo el día pintando, trabajando en una serie de raíces de árbol a lo largo de una carretera.
Según la investigación de Van der Veen, Tree Roots se pintó en la Rue Daubigny, una carretera principal que atraviesa Auvers-sur-Oise (una ciudad situada a 32 kilómetros al norte de París).
Los turistas pueden visitar fácilmente las enmarañadas y nudosas raíces de los árboles y los tocones que hoy se encuentran junto a la carretera. De hecho, la ubicación de Van der Veen se encuentra a sólo 500 pies del Auberge Ravoux, donde Van Gogh pasó los dos últimos meses de su vida, y donde finalmente murió.
El disparo, una incógnita perpetua
El momento en que el pintor decidió quitarse la vida permanece como una incógnita. No hay fuentes acreditadas que sepan decir cómo ocurrió todo. La versión oficial es que el pintor, agobiado por presiones mentales y espirituales, se disparó y el proyectil no alcanzó sus órganos vitales. Por ello es que tardó entre 29 y 30 agónicas horas en morir.
Los habitantes de Auvers mantuvieron un prolongado silencio sobre el incidente. Al principio, nadie admitió haber visto a Van Gogh en su última y fatídica salida, a pesar de que se trataba de un lugar donde había mucho movimiento.
Nadie sabía de dónde había sacado una pistola ni admitió haberla encontrado después. Tampoco se encontraron los demás objetos con los que siempre cargaba: lienzo, caballete, pinturas, etc. Los médicos que lo atendieron en su lecho de muerte, un obstetra y un homeópata, no pudieron dar sentido a sus heridas.
Existen muchas interrogantes que pueden poner en entredicho la versión oficial. ¿Quién intenta suicidarse con un disparo en el centro del cuerpo? ¿Por qué, en lugar de rematarse con un segundo disparo, Van Gogh regresó a su habitación tambaleándose durante un kilómetro y medio con un dolor agónico por una bala en el vientre?
La teoría que dice que Van Gogh no intentó suicidarse
En 2011, los biógrafos Gregory White Smith y Steven Naifeh argumentaron en su libro Van Gogh: The Life, la teoría de que Van Gogh no se disparó a sí mismo, sino que recibió un disparo accidental de René Secrétan, un adolescente de 16 años, quien pasaba el verano en la aldea.
René Secrétan era el hijo de 16 años de un farmacéutico parisino cuya familia veraneaba en Auvers. Biógrafos de Van Gogh menciona que el adolescente estaba obsesionado con Wild Bill Cody, cuyo espectáculo del Salvaje Oeste había visto René en París el año anterior.
Cuando René llegó a Auvers, Van Gogh ya era objeto de rumores y burlas. Recorría la ciudad con su oreja destrozada y su torpe carga, disponiéndose a pintar en cualquier lugar que se le antojara. La gente lo veía como alguien extraño.
Según Gregory White Smith y Steven Naifeh, Secrétan se dedicaba a molestar al pintor en compañía de sus amigos. A la fecha, no hay pruebas que concluyan que René disparara deliberada o accidentalmente al pintor o que le diera al arma con la que se hirió.
Sin embargo, quedan muchas interrogantes: los médicos que examinaron al pintor afirmaron que el ángulo de la herida indicaba que el arma se disparó desde lejos. Asimismo, la trayectoria de la bala entró desde un ángulo extraño y oblicuo en su estómago y no en la cabeza (como cabría esperar en caso de suicidio).
Por su cuenta, el Museo Van Gogh sigue afirmando que la muerte fue indudablemente un suicidio. “Van Gogh sí intentó suicidarse, ya que las pruebas abrumadoras demuestran que ya tenía esa idea desde su decisión de 1889 de encerrarse en el manicomio”, dice Louis van Tilborgh, conservador jefe del Museo Van Gogh de Ámsterdam.
El debate de su última obra
Durante más de un siglo se ha debatido sobre qué cuadro fue la última obra de Van Gogh, principalmente debido a que el artista rara vez, o nunca, fechaba sus obras. Algunos sostienen que no fue Raíces de árbol, sino Campo de trigo con cuervos (1890).
En la película biográfica de Vincente Minnelli, Lujuria por la vida (1956), se puede ver a Kirk Douglas (que interpreta a Van Gogh) pintando esa obra mientras se vuelve loco. La segunda razón es que Campo de trigo con cuervos es un cuadro inquietante y ominoso que encaja perfectamente como una especie de “nota de suicidio”.
