La llegada del metaverso generará diversos cambios en el sector logístico y el transporte, en donde se prevé tenga aplicaciones principalmente en capacitación, eficiencia en la operación y optimización en planeación de la demanda.
Para Angélica Bojórquez, directora de Cadena de Suministro de Coppel, con el metaverso se podrán crear ambientes virtuales, hacer una copia exacta de un ambiente real respetando las mismas reglas físicas, con los cuales se abrirá la posibilidad de simular.
«Esto nos ayudará mucho en la logística porque, por ejemplo, si queremos probar un nuevo empaque y nuestros envíos de ropa para compras realizadas en el canal digital, en el metaverso dará la posibilidad de generar un Digital Twin (un gemelo digital) del empaque», explicó.
Con dicha tendencia tecnológica se podrán simular todos los procesos por los que pasa un producto, desde su empaque, transportación, entrega, y ver en qué condiciones llega el producto al cliente. O simular la operación de un centro de distribución.
«Además sería más económico hacer las pruebas en un mundo virtual que en uno físico.
«También promete trasladar virtualmente la planeación y visualizar los posibles riesgos y correr diversos escenarios», aseguró la también consejera del Consejo Nacional de Ejecutivos en Logística y Cadena de Suministro (Conalog).
Para Óscar Vázquez, director de logística y planeación de Kellogg Latinoamérica y consejero de #SoyLogístico el metaverso tendrá un fuerte impacto en la capacitación de los diferentes actores de la cadena logística, principalmente en operadores de camión y montacarguistas.
«Por ejemplo, un conductor podrá ser capacitado en un mundo virtual que parezca real y enfrentará accidentes de tránsito, recorrer diversos caminos con distintos climas, lo que permitirá saber cómo será su reacción ante distintos escenarios, sin ponerlo en riesgo real», dijo.
Par el especialista logístico, el metaverso permitirá eficientar los costos logístico entre un 10 y 20 por ciento. No obstante, reconoció que uno de los grandes retos para su implementación en el País será la inversión que cada empresa pueda realizar en dicho ámbito.
«Otro reto será la adaptación de los nuevos comportamientos del cliente en la adquisición de productos, esto generará un cambio de paradigma en cómo se manejan los inventarios, cómo se estiman las demandas y cómo se realiza la entrega de los productos», puntualizó Bojórquez