El Presidente Andrés Manuel López Obrador anunció ayer una reducción de operaciones en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) y encomendó a Claudia Sheinbaum, Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, las obras federales para apuntalar la Terminal 2.
El Mandatario argumentó que limitarán los vuelos porque está muy saturado el aeropuerto de la Ciudad de México.
«Es el número de vuelos y el incremento de pasajeros, son muchas ya las operaciones y tenemos el Aeropuerto de Santa Lucía, el Felipe Ángeles, entonces se va a ordenar lo del uso del Aeropuerto», anunció el Mandatario en su conferencia de prensa.
Los trabajos de reforzamiento de la Terminal 2 del AICM fueron encargados a la Jefa de Gobierno de la CDMX, con el argumento de que el Ejército y el Gobierno federal ya tienen mucha obra en proceso.
El Presidente anunció que el Gobierno federal aportará alrededor de 600 millones de pesos a la Administración capitalina para que se encargue de asignar y supervisar esos trabajos en la T2.
«Para reforzar sobre todo la cimentación, porque tiene problemas estructurales y ya hay un proyecto con ese propósito», indicó López Obrador.
Y CDMX incumple con tren
El esquema por el que la Federación entregará recursos a la CDMX para las obras de reparación de la T2 del AICM ya se utilizó en el Tren Interurbano México-Toluca, y el Gobierno local es el más retrasado.
Se trata del llamado Tramo III, de 17 kilómetros, que corre del bitúnel de La Marquesa a Observatorio.
Se han transferido mil 300 millones de pesos y el avance de la obra es de 56.8 por ciento a mayo, cuando dejaron de darse reportes.
La obra, cuya construcción arrancó en 2013, ha triplicado su costo, pues su presupuesto inicial era por 38 mil millones de pesos, y actualmente es de 103 mil 615 millones de pesos, un aumento del 173 por ciento, según datos de Hacienda.