Alexis Massieu
Víctimas del régimen de Nicolás Maduro, una familia de 7 venezolanos que busca el sueño americano llegó a Monclova la noche de ayer luego de 4 meses de viajar por el territorio nacional, sueño del que los separan 236 kilómetros de carretera a pie y que se tornan en una pesadilla dado el intenso calor del verano y que llevan en brazos a un bebé de 10 meses.
Cuatro adultos, tres mujeres, un hombre con discapacidad y tres menores de edad, dos varones y una niña; son los integrantes de una familia que ha sufrido todo debido a la miseria a la que el régimen izquierdista conocido como Chavismo ha llevado a la nación sudamericana, contó Yesica, el día de ayer mientras pedían ayuda en un concurrido cruce en la Zona Centro.
Ella salió de su país debido a la pobreza, dejando atras a sus padres, un hermano muerto durante una manifestación, otro exiliado en Colombia, y a tres de sus hijos al cuidado de los abuelos.
Para ellos explica, cualquier país de los que han atravesado es bueno para vivir, pero necesitan un trabajo que les dé además del dinero suficiente para salir adelante, otro tanto para que sobrevivan los que se quedaron, por eso de la necesidad de llegar a los Estados Unidos de América.
“Salimos de la selva robados, lo poquito que dejamos guardado en nuestras casas y que nos fueron enviando en el camino nos lo empezaron a robar, ¡Guatemala es lo peor con la migración y la policía!”.
CAMINAN CON BEBÉ CARGADO
Necesitan comida y leche, su bebé Andrés cumplió 10 meses nació en Ecuador
Su esposo es el único hombre que viaja con ellas, y admite es complicado por la seguridad, como cuando los robaron en Tapachula Chiapas; lo que tienen se los han regalado en el camino, la gente es muy humanitaria asegura.
“En Tapachula golpearon a mi esposo, él; es discapacitado, tiene un problema en la “aparcadera”, le partieron la boca, me querían quitar al niño porque no quería darles el bolso que traíamos, pensaban que llevábamos dinero, nos golpearon, a la mamá de ella le pasaron una hojilla (navaja) por la cara que gracias a dios no la agarró completamente porque si no… imagínese”.
En el tiempo que llevan transitando por Coahuila dijo, no se han acercado las autoridades con ellos; solamente la gente humanitaria, “el mismo pueblo es el que nos ha dado apoyo, ¡que Dios nos los bendiga siempre!”.
Lo que más le preocupa es la alimentación para su hijo, es más difícil llegar con niños a la frontera, y lo que están pidiendo es leche para el bebé y una comidita, porque ya un señor les regaló unos pañales.
“Tenemos que seguir el camino con el niño cargado, no tengo ni un cochecito, traía un canguro, pero ya se me dañó”.
Ayer dijo iban a estar todo el día pidiendo, para ver si pueden partir hoy mismo, luego de pasar la primera noche en la central de autobuses, señaló la migrante por si alguien los puede ayudar “con lo que salga de su corazón” para continuar el viaje.
Junto a Yesica viajan tres menores, un niño de 11 una adolescente de 12 y el niño de 10 meses que nació durante el viaje en Ecuador.
En Venezuela agregó, solo la esperan ya su madre y sus tres hijos, ella sola está luchando por sobrevivir, ya que estando ella de viaje murió su papá, a uno de sus hermanos lo mataron durante una manifestación y el otro encontró refugio en Colombia, un país en el que ya no caben más venezolanos.
En Estados Unidos refirió, tienen asilo político similar al que le dan a los cubanos, y recientemente les dieron permiso para transitar durante 30 días por la República Mexicana.