Por Lilia de la Fuente
“HIJOS INGRATOS”
Hijos ingratos los que muchas veces
Les dicen a sus madres fríamente:
¡al mundo me trajiste por tus ganas!
¡yo no te lo pedí! ¿estás consciente?
Me tienes que vestir con ropa fina,
para poder cumplir en ese ambiente;
la sociedad exige muchas cosas
y reuniones con gente prominente.
Escogí una carrera muy difícil,
no puedo trabajar al mismo tiempo,
si haces pasteles,
remiendas, lavas, planchas,
cuando termine ¡ya verás,
será otro cuento!
En asilos de ancianos hay viejitas,
que los hijos recluyen sin pensar,
que les dieron amor
y hasta la vida
y después, los olvidan sin piedad.
“SONETO A MI MADRE”
Los ojos de mi madre suave embrujo,
a su rostro senil dan armonía;
con igual suavidad al alma mía
detiene en la tormenta con su influjo.
Con sus claras pupilas me condujo,
salvándome quizá en la agonía;
y aquel motivo que me consumía
salió de mí, igual que se introdujo.
Se produjo en mí ser aprisionado:
serenidad, amor y lozanía.
Difícil comprender lo había jurado.
A mis horas fatídicas venía,
la mirada de un ser santificado;
de esa Madre sublime, que es la mía.
PIEDRAS NEGRAS.
Mi Piedras Negras Coahuila, mi fronteriza ciudad.
Tu esplendor le llega al mundo por tu esencia natural.
Dios te viste con la aurora, con la brisa del Río Bravo,
Que se mueve cauteloso como linderos marcados.
Tus hombres recios titanes, tus mujeres señoriales,
Son de férrea voluntad, pero muy espirituales.
Piedras Negras te distingues por la equidad de tu gente,
Por la visión progresista y un pasado prominente.
Enigmáticas culturas influyen en tu presente,
Pirámides y estructuras modernas pero, imponentes.
Carranza aquí se instauró, su ejército conformó,
Dejando como legado; las leyes que reformó.
Es de la Gente esta puerta, muy segura y siempre abierta,
Como paso es ideal, gran conducto fraternal…
Allá están nuestros hermanos, firmes, tendiendo su mano,
Ayudando con respeto, a todos los que emigramos.
Mi Piedras Negras Coahuila, en tu subsuelo hay carbón
Y lleva luz y esperanza, tu gente en el corazón.
Allá la Villa de Fuente y los ranchos ganaderos,
El mercado, las iglesias y los parques de recreo.
Están cerca los parajes los ranchos de cacería,
Las ferias son las más bellas de esta tierra tan bravía.
Piedras Negras, Piedras Negras, Puerto limpio y transparente
Recibe las bendiciones que DIOS le manda a tu gente.
L y M. Lilia de la Fuente Ruiz.