El Presidente ruso, Vladimir Putin, asistió este martes a supervisar grandes ejercicios militares en el extremo oriental de su país en los que participaron tropas de China y otras naciones, en una muestra de músculo militar en medio de las tensiones con Occidente tras la invasión a Ucrania.
Los ejercicios de una semana de duración, que comenzaron el jueves, tienen como objetivo mostrar los crecientes lazos de defensa entre Rusia y China y también demostrar que Moscú tiene suficientes tropas y equipos para los simulacros masivos, incluso mientras sus fuerzas están ocupadas en Ucrania.
El Ministerio de Defensa ruso dijo que el Ejercicio Vostok 2022 (Este 2022), que se desarrollará hasta el miércoles en siete campos de tiro en el Lejano Oriente de Rusia y el Mar de Japón, involucra a más de 50 mil soldados y 5 mil unidades armadas, entre ellas 140 aviones y 60 buques de guerra. En él participan tropas de varias antiguas naciones soviéticas, así como China, India, Laos, Mongolia, Nicaragua y Siria.
Beijing envió más de 2 mil soldados junto con más de 300 vehículos militares, 21 aviones de combate y tres buques de guerra para participar en los simulacros, según informes de prensa chinos. Como parte de las maniobras, las Armadas rusa y china en el Mar de Japón practicaron acciones conjuntas para proteger las comunicaciones marítimas y apoyar a las fuerzas terrestres en las zonas costeras.
Neil Melvin, jefe de estudios de seguridad internacional del Royal United Services Institute de Londres, opinó que los simulacros tienen como objetivo «mostrarle a Occidente y a sus aliados en Asia, que esto se trata de una relación militar y de seguridad emergente que debe tomarse en cuenta».
Los ejercicios son la continuación de una serie de maniobras militares conjuntas de Rusia y China en los últimos años, entre ellos ejercicios navales y patrullas por parte de bombarderos de largo alcance sobre el Mar de Japón y el Mar de China Oriental. El año pasado, las tropas rusas se desplegaron por primera vez en territorio chino para maniobras conjuntas.
El ejercicio marcó la primera vez que China envía tropas de tres ramas de sus fuerzas armadas para participar en un solo simulacro ruso, una señal de los lazos cada vez más estrechos entre Moscú y Beijing, que se fortalecieron desde que Putin envió tropas rusas a invadir Ucrania el 24 de febrero.
China se ha negado reiteradamente a criticar las acciones de Rusia, culpando a Estados Unidos y a la OTAN de provocar a Moscú, y ha criticado las fuertes sanciones occidentales contra Rusia.