La venta de alcohol alrededor de los estadios del Mundial 2022 en Qatar «no será diferente» de Mundiales precedentes y se desarrollará «como de costumbre» en el resto del país, aseguró este jueves el máximo responsable del comité de organización del torneo.
«Pienso que hay una idea falsa sobre la venta de alcohol en los estadios. Operamos como cualquier otro Mundial», insistió Nasser Al-Khater en una rueda de prensa en Doha, a 73 días del evento.
Durante el torneo, del 20 de noviembre al 18 de diciembre, quioscos de cerveza abrirán alrededor de los estadios entre 3 horas y 30 minutos antes del inicio de los partidos, para abrir una hora más después del pitido final.
En la principal fan zone de la FIFA, en la capital Doha, consumir alcohol solo será posible a partir de las 18:30 horas (locales), «ya que habrá familias», precisó Al-Khater.
«Este límite de tiempo no será válido en las otras fan zones y los hoteles que vendan alcohol, donde se hará como siempre», precisó.
En Qatar, país musulmán conservador, el alcohol solo puede ser comprado por los residentes no musulmanes en un comercio gubernamental y en una treintena de bares y restaurantes de hoteles. En tiempos normales, beber en público no está autorizado fuera de estos lugares.
Muchos países, como Francia o Gran Bretaña, restringen la venta de alcohol en los estadios.
Además de la venta de alcohol, la disponibilidad y los precios de alojamiento en el pequeño emirato del Golfo preocupan a los aficionados de las 31 naciones clasificadas, en además del país organizador.
El director general del comité supremo de organización, Yasir Al-Jamal, afirma estar «100 por ciento seguro» de que todos los visitantes encontrarán alojamiento en Qatar, que finalmente decidió autorizar a los poseedores de billetes de partidos a venir acompañados por tres personas como mucho de su entorno, aunque no tengan entradas.
Qatar espera entre 1 y 1.2 millones de visitantes durante el torneo.