Los reyes Carlos I y Carlos II de Inglaterra gobernaron en distintas épocas y de maneras peculiares. Conoce sus respectivas historias.
Muy Interesante
Charles Philip Arthur George es el hijo de la fallecida reina Isabel II y quien asume el trono del Reino Unido. Será el hombre más viejo en hacerlo a sus 73 años de edad y será bajo un nuevo nombre: Carlos III. Antes de su ascenso como nuevo monarca, estuvieron los reyes Carlos I y Carlos II de Inglaterra, hombres que gobernaron en distintas épocas y de maneras peculiares. Conoce sus respectivas historias.
Quién fue Carlos I de Inglaterra
Nacido el 19 de noviembre de 1600, en Dunfermline, Escocia, Carlos I fue segundo hijo de Jacobo I. Se convirtió en heredero forzoso del trono luego de la muerte de su hermano mayor Enrique. Debido a ello fue nombrado príncipe de Gales en 1616.
En 1623 viajó a España para negociar su matrimonio con la infanta María, sin embargo, la familia de ella se negó a esta alianza. Entonces, Carlos I se casó con la princesa francesa Enriqueta María. De esa manera, Inglaterra y Francia formaron una alianza contra España.
Fue en 1625 cuando el príncipe se convirtió en rey y se casó con Enriqueta María, con quien tuvo dos hijos, Carlos II y Jacobo II. El matrimonio no estuvo exento de polémicas, ya que ella era católica y sus creencias chocaban con los súbditos protestantes de su marido.
Ello condujo a una guerra civil y a enfrentamientos directos con el Parlamento británico, al cual deshizo para gobernar sin él durante 11 años. El gobierno de Carlos I se caracterizó por un férreo absolutismo y la imposición del culto anglicano, con persecuciones a los opositores.
Uno de los conflictos más fuertes en los que se vio envuelto fue con Escocia, país donde intentó imponer la liturgia anglicana. Esto provocó disturbios por parte de los escoceses presbiterianos. Carlos I fue incapaz de reprimir la rebelión, por lo que en 1640 convocó el llamado Parlamento Corto para reclutar un ejército y reunir el dinero necesario.
Tras diversas disputas, el Parlamento mandó encarcelar y ejecutar al arzobispo de Canterbury, William Laud y sir Thomas Wentworth, primer conde de Strafford, quienes eran consejeros de Carlos I. Ello obligó a partir de 1641 una mayor libertad de creencia para los escoceses, además de otras reformas menos rígidas.
Sin embargo, una serie de disputas llevó a que el 23 de octubre de 1642 estallara la primera batalla de la Guerra Civil inglesa, en Edgehill. Después de una serie de derrotas continuas, el rey Carlos I se rindió al ejército escocés el 5 de mayo de 1646.
En junio de 1647 lo entregaron al Parlamento inglés, sin embargo, más tarde escapó a la isla de Wight, donde lo encarcelaron.
El 20 de enero de 1649 comenzó el juicio en contra del rey en Westminster. A pesar de que se negó a declararse culpable, el 27 de enero lo sentenciaron a muerte por tirano, asesino y enemigo de la nación. Tres días después, Carlos I fue decapitado en Whitehall, Londres.
Quién fue Carlos II de Inglaterra
Fue el hijo mayor de Carlos I de Inglaterra y su esposa Enriqueta María. Mientras su padre se encontraba en plena guerra civil inglesa que ya narramos anteriormente, su hijo, entonces príncipe, se fue al exilio en Francia.
Intentó recuperar el trono de Escocia, ya que contaba con partidarios en ese país, pero fue derrotado por Oliver Cromwell en la batalla de Worcester (1651). Fue hasta la muerte de Cromwell, en 1658, que llegó al trono en 1660 bajo el nombre de Carlos II, quedando así restaurada en Inglaterra la dinastía Estuardo.
Su reinado estuvo marcado por diversos acontecimientos: dos nuevas guerras contra Holanda (1665-67 y 1672-74), además de la peste, en 1665, y el gran incendio de Londres, en 1666.
Al igual que su padre, se enfrentó de manera férrea al Parlamento. Asimismo, restableció la Iglesia anglicana frente a la hegemonía puritana de tiempos de Oliver Cromwell. El Parlamento no daba su brazo a torcer: rechazó la proposición regia de tolerancia hacia los católicos, a los que excluyó de ocupar cargos públicos, en 1673.
Era conocido como ‘El Alegre Monarca’ e impulsó la ciencia y el arte. Vivió la muerte de la ‘reina madre’ María I en 1558 y la deposición de su bisabuela María, Reina de los Escoceses, en 1567.
Cuando tenía 54 años sufrió una apoplejía, que muchos pensaron que podía ser en realidad un intento de envenenamiento. Poco antes de morir en el Palacio de Whitehall, Londres, el 6 de febrero de 1685, decidió convertirse al catolicismo en su lecho de muerte.