José Luis Abarca, exalcalde de Iguala, y su esposa María de los Ángeles Pineda Villa recibieron un nuevo auto de formal prisión emitido por el juez Segundo de Distrito en Materia de Procesos Penales Federales con sede en el Estado de México, Enrique Beltrán Santes.
La resolución judicial significa que ambos acusados enfrentarán proceso penal como probables responsables del delito de delincuencia organizada en su modalidad de delitos contra la salud al presumirse una relación con el grupo criminal Guerreros Unidos, acusado de perpetrar la desaparición de los 43 normalistas en septiembre del 2014.
La decisión judicial alcanzó también a quien fuera secretario de Seguridad Pública de Iguala, Felipe Flores Velázquez, y quien sí será enjuiciado bajo las acusaciones de delincuencia organizada y desaparición forzada.
La nueva acusación se fundamenta en la declaración de dos testigos colaboradores de la Fiscalía General de la República (FGR) quienes declararon que el matrimonio de Abarca y Pineda dio protección a la organización criminal dedicada al tráfico de drogas.
El auto de formal prisión fue notificado al agente del Ministerio Público Federal a escasos cuatro días de que se cumpla el octavo aniversario de la desaparición de los 43 estudiantes de la normal rural de Ayotzinapa, Guerrero.
