Por: Jesús Medina
Los daños y robos al ramal de distribución de combustibles de Petróleos Mexicanos en tramos de al menos 8 kilómetros, ocasionó fuertes daños a la paraestatal, que se vio en la necesidad de realizar medidas alternas para las entregas a sus clientes.
Aunque la situación no se ha dado a conocer a rango oficial, se conoce por cercanos a la paraestatal que una parte de la tubería del ramal de Cadereyta Jiménez, Nuevo León a Sabinas, fue dañado por ladrones que destruyeron el tubo de distribución, hecho de acero especial, lo que aumenta su valor aunque sea en trozos en la venta de mercado negro.
Se habla de al menos 8 kilómetros de afectación y esta se daría en la parte Norte de Monclova en la Estación El Granjeno.
Mientras se llevan a cabo las reparaciones del ducto o ramal de distribución, las entregas de gasolina de Pemex a sus clientes se hace en pipas.
De estos hechos, ninguna autoridad ha reconocido el fuerte agravio a la Nación.