CIUDAD DE MÉXICO.-El Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y Cártel de Sinaloa (CDS) mantienen una cruenta disputa por el control de las rutas carreteras que pasan por el centro de Zacatecas y tienen como destino Durango, Aguascalientes, Jalisco, Coahuila y San Luis Potosí, vías estratégicas para el trasiego de drogas y el robo de combustible.
Los principales hechos de violencia de los últimos días se han registrado en los municipios de Fresnillo, Zacatecas capital, Guadalupe, Calera y Jerez, que se han convertido en una zona de confrontación luego que el CJNG controla el sur del estado, en los límites con Jalisco, y el CDS domina la región noroeste, en la frontera con Durango.
De acuerdo con estadísticas del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, esos cinco municipios registraron 601 víctimas de homicidio doloso, cifra que equivale al 55 por ciento de los mil 90 casos reportados en el periodo enero-octubre de este año.
Desde ahí parten las rutas que conectan a la entidad con el Pacífico, con el norte del País y también con la zona centro.
Apenas el pasado domingo, tras un intento de motín y fuga de reos en el penal de Cieneguillas, el crimen organizado mostró su capacidad de reacción al desplegar en cuestión de minutos bloqueos con vehículos incendiados y ponchallantas al menos ocho puntos carreteros.
«Tenemos una ubicación geográfica estratégica, Zacatecas es el ombligo, el nudo carretero del País, todas las personas y todas las mercancías buenas y malas que se trasladan del sur y centro del País hacia el norte tienen que pasar forzosamente por Zacatecas», advirtió Arturo Nahle, titular del Poder Judicial estatal.
«Es una guerra cruenta entre estas dos organizaciones criminales que son muy poderosas y muy violentas».