El Heraldo de México. Un sacerdote cercano al papa Francisco quien era director espiritual de un convento en Eslovenia es acusado por una exmonja de haber utilizado su control “psico-espiritual” para abusar sexualmente tanto de ella como de varias mujeres que decidieron dedicarse a servir a la Iglesia. De acuerdo con la víctima, el padre las obligaba a tener relaciones sexuales con él, que incluían tríos y ver películas para adultos.
Marko Iván Rupnik de ahora 68 años de edad, fue señalado por la monja de 58 años de haberla obligado a tener relaciones sexuales con él al usar su relación con Dios. Rupnik pertenece a la orden católica de los jesuitas de la cual el papa Francisco es miembro. La monja, quien pidió su anonimato, dio a conocer su caso al medio italiano Domani citado por Daily Mail.
«El padre Marko comenzó a entrar lenta y dulcemente en mi mundo psicológico y espiritual, explotando mis incertidumbres y fragilidad y usando mi relación con Dios para empujarme a tener experiencias sexuales con él», dijo la monja.
De acuerdo con la religiosa, el abuso sexual se presnetó entre 1987 y 1994, periodo donde además aseguró que fue acosada por el propio Rupnik para que silenciara su experiencia. En una ocasión dijo, el padre le pidió a ella y a otra monja que tuvieran relaciones entre los tres para replicar la relación tripartita entre Dios, Jesús y los Espíritus Santos.
La monja acusa que protegen al padre Rupnik
Durante los años de los abusos que asegura sufrió la monja, el padre Marko Iván Rupnik habría abusado de al menos 20 religiosas, ante ello, la monja indicó que denunció en varias ocasiones el comportamiento del sacerdote, pero fue frenada por religiosos superiores que “rutinariamente” protegían al católico, «Fue realmente un abuso de conciencia«, expresó.
Tras las acusaciones de la monja, el domingo, la orden jesuita del Papa Francisco pidió a más víctimas de abuso por parte del sacerdote Marko Rupnik a denunciar los ataques. De acuerdo con el medio citado, el padre ha sido liberado por El Vaticano en al menos dos ocasiones ante las denuncias de otras mujeres que dieron testimonio del abuso sexual que sufreron por parte del sacerdote.
Los jesuitas pidieron nuevas pruebas que incriminen a Marko Rupnik y dedicaron un espacio para atender el caso. El sacerdote es conocido por la jerarquía jesuita al ser uno de los artistas más buscados de la Iglesia, ya que ha decorado capillas, iglesias y basílicas de todo el mundo; sin embargo, su nombre se expuso a la opinión pública la semana pasada cuando se destapó el escándalo sexual en su contra.
En mayo de 2020, Marko Rupnik fue declarado excomulgado, pero un mes después, la Congregación para la Doctrina de la Fe del Vaticano levantó la excomunión, al asegurar que el sacerdote se mostraba arrepentido. Sin embargo, un años después, la misma Congregación no lo proceso por otra acusación en su contra de abuso sexual de una exmonja, al argumentar que el plazo de prescripción había expirado.
La orden religiosa había declarado sobre el caso de abuso del 2021, pero no así sobre el caso de excomunión, hecho que fue admitido por el superior jesuita, el reverendo Arturo Sosa quien lo confirmó a la agencia AP, en ese sentido, el ministerio de Rupnik había sido restringido y tenía prohibido escuchar confesiones, dar dirección espiritual o dirigir ejercicios espirituales.
Pero, Rupnik está programado para realizar ejercicios espirituales del 13 al 17 de febrero en el santuario mariano de Loreto en la costa adriática de Italia, según el sitio web de Loreto, pese a la reciente acusación de la exmonja.
