Alexis Massieu
El afamado bache de la Carretera 53 que rebasó las fronteras neolonesas a base de provocar tragedias con 4 personas muertas, daños incalculables y al menos 20 lesionados, ha sido referido en múltiples ocasiones por viajantes del tramo Monclova-Monterrey quienes alertan a otros automovilistas para que tengan cuidado.
Al día de ayer ninguna autoridad se ha manifestado para hacerse responsable de los daños, las persona lesionadas, pero sobre todo de las cuatro víctimas fatales que ha dejado el deterioro en la carretera federal que no ha recibido mantenimiento porque a la Secretaría que le corresponde dárselo le redujeron el presupuesto.
El tramo de Mina, donde se ubica el bache, en Nuevo León casi llegando a Coahuila, ha sido escenario de múltiples accidentes, se señala que cuatro de ellos mortales, y un sinfín de daños a los automóviles, principalmente en llantas, rines y suspensiones, por las enormes proporciones del hoyanco.
Sin embargo, pese a la peligrosidad de este bache, ni las autoridades federales vía la SCT, ni el Gobierno estatal de Nuevo León o el municipio de Mina se han hecho presentes para cubrir el enorme hoyo que ha costado vidas y daños en miles de pesos.
Este lunes, ciudadanos monclovenses tuvieron la iniciativa de llegar hasta el tramo en mención, alertados por el grave peligro que implica, llevando asfalto donado por el Alcalde Mario Dávila y equipo proporcionado por el empresario Mario Linaje, a fin de cubrir al menos provisionalmente el bache y evitar más pérdidas humanas y materiales.
Pese a que son múltiples los baches en el tramo carretero que comunica La Sultana del Norte con Monclova, precisamente pasando la guarda raya en los límites de Castaños con Mina, al menos uno de los más peligroso fue recarpeteado el día de ayer por parte “a mano” por monclovenses.
Testigos apuntan que el más peligroso es uno ubicado entre los kilómetros 109 y 110 en el carril que conduce de Monterrey a Monclova, el cual no hay manera de evitarlo salvo invadiendo carril.
El mega-bache de la 53 señaló un automovilista a éste matutino el día de ayer, no se puede evitar usando el carril de acotamiento, y de ir circulando a más de 110 kilómetros por hora es muy difícil de ver a tiempo para poder frenar, siendo lo más peligroso no el ancho o el largo del pozo, sino su profundidad.