El lanzamiento estaba planeado para el próximo martes 10 de enero en todo el mundo, pero algunas librerías, en el trasiego de los Reyes Magos, han sacado a la venta algunos ejemplares
El País. 05 de enero 2023
Las esperadas memorias del príncipe Enrique de Inglaterra, En la sombra, que se traducen a 16 idiomas y publica en España Plaza y Janés, se lanzan en todo el mundo el próximo día 10 de enero. Teóricamente. Porque hay algunos habitantes del planeta Tierra que ya han podido comprar una copia en papel del preciado volumen. Y esos lectores afortunados están en España. Algunas librerías han puesto este jueves por error a la venta el libro cinco días antes de la fecha indicada por la editorial, y algunos ejemplares, no se sabe cuántos, se han vendido y algunos de sus compradores los están exhibiendo en redes.
Uno de los ejemplares vendido por error ha caído en manos del tipo de persona a la que más le puede interesar: un periodista británico. En el Reino Unido, como es natural, el libro está generando un interés mayor que en otros territorios: la información contenida en el volumen, con detalles nunca antes conocidos de las relaciones internas de la familia real, asegura, sobre todo si es adelantada, elevadas audiencias. De modo que los medios británicos llevan semanas tratando de hacerse con un ejemplar. Ha sido en España donde algunos han podido encontrar por adelantado las intimidades impresas de su realeza.
El colaborador del tabloide británico The Daily Mail Graham Keeley ha conseguido su copia en un establecimiento de La Casa del Libro en Barcelona, la cadena de librerías perteneciente al Grupo Planeta. “¡Famoso por fin! Encontré el libro de Harry que fue puesto a la venta por error en España”, escribió en la mañana de este jueves en la red social Twitter. Se encontraba en la sección de Recomendados a un precio de 21.90 euros, según publica el propio medio, que corrobora el hallazgo con una fotografía del periodista posando con el libro en la misma librería. También el diario The Sun ha conseguido su copia
Todo lo que rodeaba al libro del duque de Sussex se mantenía en alto secreto y solo los altos ejecutivos de la editorial conocían los detalles de la narración. Advertidas del error, las librerías han retirado el producto. Este periódico ha intentado, sin éxito, ponerse en contacto con La Casa del Libro para recabar su versión de los hechos. En una librería del distrito de Chamberí, en Madrid, también han sido avistados algunos ejemplares a la venta, que, poco tiempo después han sido devueltos al almacén, a la espera de su momento justo.
Ya han empezado a trascender detalles del texto. Por ejemplo, la dedicatoria: “Para Meg, Archie y Lili… y, por supuesto, mi madre”. Su madre fue Lady Di, princesa de Gales, fallecida en 1997 en un accidente de tráfico en París a los 36 años. Un detalle que está siendo muy comentado es que el príncipe asegura haber matado a “25 talibanes” en las operaciones en las que participó durante la guerra de Afganistán. Admite también haber consumido cocaína y marihuana en algunos momentos de su juventud.
Otros detalles revelados por periodistas de la agencia Reuters, basados en la traducción española, tienen que ver con el inicial rechazo y posterior aceptación de Camila Parker Bowles como esposa de su padre, el rey Carlos III de Inglaterra (y ella, hoy, reina consorte); con el disfraz de oficial nazi con el que se presentó en una fiesta en 2005 (según dice, alentado por su hermano); o con la controversia en torno a si el militar James Hewitt es su verdadero padre, fruto de un romance con Lady Di: lo niega rotundamente.
Se espera que las memorias de Enrique contengan mucha información jugosa. El diario británico The Guardian ya había publicado a última hora del miércoles una anécdota filtrada del texto: que Guillermo de Inglaterra, príncipe de Gales, y su hermano Enrique llegaron a las manos en 2019 en Nottingham Cottage, una vivienda que forma parte del complejo de Kensington, en Londres. Guillermo fue incapaz de aguantar la rabia que le producía la forma en la que su cuñada Meghan Markle había irrumpido en la familia real británica. “Me agarró por el cuello (de la camisa), arrancó el collar, y me tiró al suelo. Aterricé sobre el cuenco del perro, que se rompió bajo mi espalda”, escribe Enrique. Antes de derribarlo, el príncipe Guillermo habría llamado a Markle “difícil”, “grosera” y “áspera”, según relata el duque de Sussex.