RAMOS ARIZPE, COAHUILA. – Familiares, vecinos, amigos y conocidos dieron el último adiós a Joan Alonso, tenía 7 años de edad, quien lamentablemente perdiera la vida el pasado jueves 5 de enero del año en curso al estallarle un cohete cerca de la cara cuando se encontraba jugando en un predio baldío.
El cuerpo del menor fue llevado a su domicilio ubicado sobre la calle Sauz en su cruce con la calle Tuna en la congregación de Cañada Ancha para su velación de cuerpo presente, entre llanto, tristeza y desconsuelo de sus familiares los asistentes expresaron su más sentido pésame y acompañaron su dolor.
Alonzo formaba parte de una familia de 5 integrantes siendo el hijo menor, 2 hermanos gemelos mayores, su papá de nombre Pedro Alejandro Torres y su madre Brenda Elizabeth Iracheta López.
Los hechos de la tragedia se registraron cuando al andar jugando con más niños a espaldas de su casa, le estalla en la cabeza un cohete, lo que provocó que rápidamente sus padres dieron aviso al sistema de emergencias 911, sin embargo, con la desesperación salieron del domicilio y decidieron trasladarlo a bordo de un vehículo al hospital, minutos más tarde fueron interceptados en carretera por los paramédicos de Bomberos quienes lo subieron a la ambulancia y lo llevaron a la clínica 1 del IMSS.
Desafortunadamente, debido a las heridas que presentaba el menor, los especialistas de la clínica nada pudieron hacer por lo que perdió la vida en el nosocomio, arribando más tarde elementos de la Fiscalía General del Estado, y ordenando el traslado del cuerpo al Servicio Médico Forense (SEMEFO).