Luego de dos años, fue desalojada la sede de Morena ubicada en la calle de Chihuahua 216, en la Ciudad de México, que había sido tomada por militantes disidentes tras la llegada de Mario Delgado a la dirigencia del partido. Autoridades de la Fiscalía de la Ciudad de México efectuaron el desalojo, resultado de un proceso judicial por el inmueble.