Alexis Massieu
Como si se hubieran invertido los papeles, Víctor Antonio “N”, el padre de Víctor García, quien murió en un accidente vial en el 2021, provocado -presuntamente- por el ex director de Protección Civil de Nadadores, Fernando Alan “N”, fue acusado del delito de lesiones levísimas y metido en la cárcel el día de ayer.
Lo anterior, ocurrió cerca de las 13:00 horas en el Centro de Justicia de Ciudad Frontera, cuando pasado el mediodía, se llevó a cabo la audiencia inicial relativa a la causa penal 244/2023, sobre hechos que supuestamente ocurrieron a finales del año 2021.
Según la acusación del Ministerio Público, el delito que presuntamente cometió Víctor Antonio “N”, ocurrió a 24 días del trágico fallecimiento de su hijo, Víctor Antonio García, quien junto con su hermano Luis, viajaba la noche del 11 de noviembre a bordo de una motocicleta por la carretera 30, cuando lo embistió una camioneta.
La tarde del 5 de diciembre, aseguran, Víctor Antonio “N”, al circular a bordo de un sedán Aveo de color rojo, por la calle principal del ejido San José del Águila, vio a Fernando Alan “N”, (el presunto homicida de su hijo) caminando por la calle, y arrastrando a sus espaldas una carretilla.
De acuerdo a lo expuesto ante el Juez Oscar Cadena García, Víctor Antonio “N” dirigió el coche hacia la humanidad del entonces funcionario municipal, golpeando la carretilla, y provocando que cayera al suelo, para enseguida apuntarle con el dedo y decirle que lo iba a matar, que le iba a hacer lo mismo que él, le hizo a su hijo.
Dos presuntos testigos, una vecina, y el padre de la ahora víctima, Fernando Alan “N”, señalaron ante el Ministerio Público, que tras la agresión, Víctor Antonio “N”, emprendió la huida. Luego, el afectado interpuso una denuncia, la cual no llegó a manos del juez, sino hasta un año 3 meses después, el día de ayer, justo cuando a punto está de arrancar el juicio oral por el homicidio culposo de Víctor Antonio García, y las graves lesiones que sufrió su hermano Luis, supuestamente por culpa de Fernando Alan “N”.
Tras solicitar el imputado al juez que le concediera 72 horas para aportar pruebas de su inocencia, el Ministerio Público, pidió a esa autoridad que se dictara una medida cautelar, consistente en la prisión preventiva de oficio, dado que aparentemente, Víctor Antonio “N”, había usado un automóvil, cual si fuera un arma, y según la Constitución mexicana, todos los delitos cometidos con un arma implican–en automático–que el imputado vaya a la cárcel.
Por ese motivo, y sin tener otra opción, el juez decretó por medida cautelar, la de la prisión preventiva, ordenando la detención de Víctor Antonio “N”, quien se vio sorprendido al momento en que se acercaron los policías para arrestarlo y llevarlo a las celdas provisionales del C4.
Pese a que los abogados de Víctor Antonio “N”, vertieron una serie de alegatos relativos a la declaración de derechos humanos y otros criterios legales sobre las repercusiones de la aplicación de la prisión preventiva en la vida de su cliente, el juez les recordó, que esa disyuntiva ya fue resuelta por la Suprema Corte de Justicia, que tuvo la oportunidad de cambiar el catálogo de delitos que ameritan prisión de oficio, y no lo hizo.
La próxima audiencia en la que se decidirá si hay elementos de prueba suficientes para que se vincule a proceso a Víctor Antonio “N”, por el delito de lesiones levísimas calificadas por ventaja y alevosía, se llevará a cabo el día de mañana a las 12:00 horas, mientras que el juicio oral contra Fernando Alan “N”, por el homicidio de Víctor Antonio García, está en espera de una fecha para arrancar.