El Rennes derrotó al París Saint-Germain este domingo en el Parque de los Príncipes por 2-0, en un partido en el que Lionel Messi recibió algunos silbidos y abucheos cuando fue anunciada la alineación, y en varias acciones.
Karl Toko Ekambi (minuto 45) y Arnaud Kalimuendo (48) sentenciaron a un PSG que sumó su séptima derrota en 2023, contando todas las competiciones, y la cuarta de la temporada en la Ligue 1.
A 10 jornadas del final de la competición, el PSG tiene nueve puntos de ventaja sobre el Lens, que es segundo, y 10 sobre el Marsella.
En esta ocasión, Kylian Mbappé, capitán del PSG, no pudo salvar a los suyos, pese a sus numerosos desmarques. Al final fue a saludar a los hinchas, a diferencia de un Messi, invisible en el juego, que acudió rápidamente a los vestuarios tras el silbatazo final.
El capitán de Argentina se vio envuelto en una polémica el viernes por la noche tras difundirse a través de las redes sociales que no acabó el entrenamiento del equipo el pasado martes.
Previo al partido, durante la presentación de las alineaciones, se escucharon algunos silbidos contra el astro argentino, que aún no ha renovado el contrato que tiene con el club galo hasta junio.
En algunas acciones de juego en las que no estuvo bien (45+2 y 55), Messi también fue silbado.
La pitada, no obstante, no se puede comparar a la que dedicaron los hinchas parisinos al brasileño Neymar después de que el PSG quedara eliminado la pasada temporada en octavos de la Liga de Campeones contra el Real Madrid.
Messi y su entorno está actualmente negociando con el PSG una renovación de su contrato.