Alexis Massieu
Una vez más la Unidad de Inteligencia Financiera arremetió contra Altos Hornos de México, y mientras perdió uno de los juicios contra una de sus subsidiarias, ya pidió una revisión de la sentencia, en otro de los pleitos, donde la acerera acusó de inconstitucional el congelamiento de sus cuentas bancarias, la UIF ya lo ganó.
Fue el día de ayer, que se dio a conocer en el Juzgado Cuarto de Distrito, que la sentencia relativa a la demanda de amparo 242/2022, no le favoreció a Altos Hornos de México, sobreseyendo un procedimiento en el que de manera temporal le habían concedido la suspensión de dicho congelamiento a las cuentas que tenía en todas las instituciones pertenecientes a la banca mexicana.
De la versión pública del litigio, se desprende que al presentar la demanda, Altos Hornos de México—mediante sus abogados– reclamó lo siguiente: “la medida consistente en la ilegal orden de aseguramiento, congelamiento, bloqueo u embargo de cuentas bancarias”.
Más tarde, AHMSA agregó, que además de lo anterior, era su deseo reclamar como actos inconstitucionales de la UIF, la emisión de una nueva orden, u oficio que tuviera como objetivo volver al congelamiento, aseguramiento, bloqueo, o embargo de sus cuentas bancarias, tarjetas de crédito y contratos de índole financiero qua tenían aperturadas y celebradas con las instituciones bancarias del sistema financiero mexicano.
Ante la sentencia con la que se concluyó con el segundo de los juicios de amparo que AHMSA planteó contra la UIF, los abogados de la acerera pueden presentar un recurso legal, que consiste pedir una revisión a un tribunal superior en jerarquía al juzgado que la emitió, el cual se encuentra en Saltillo, tal y como hizo a la inversa la Unidad de Inteligencia Financiera al perder el juicio frente al Corporativo Ansat.
El pleito legal por mantener a AHMSA lejos de sus cuentas bancarias, tarjetas de crédito y fideicomisos, data del 2019, y al respecto, se prevé que en los próximos días se dé a conocer la sentencia final de la demanda de amparo más vieja, la 201/2019, la cual ya se encontraba en revisión.
Sumado al proceso de quiebra que le impide a Altos Hornos de México realizar pagos a cualquiera de sus acreedores, el congelamiento de sus cuentas por parte de la UIF, complica aún más la situación de la empresa, que dentro de tres días tiene agendada una reunión en la que se presume se harán los últimos ajustes para su venta.