Por varios días, el papa Francisco permanecerá hospitalizado debido a una infección pulmonar, luego de presentar en días recientes problemas respiratorios.
Ante esto, el vocero del Vaticano, Matteo Bruni, descartó que el pontífice, de 86 años, tuviera COVID-19, pero, dijo, necesita varios días de terapia: “Las pruebas arrojaron que tenía una infección pulmonar (se ha descartado que fue una infección por COVID-19)”.
Horas antes, Francisco había acudido al Hospital Gemelli para hacerse unas pruebas, lo cual provocó que cancelara sus audiencias de los próximos dos días para someterse a análisis previstos.
El Vaticano no indicó cuánto tiempo el papa pasará en la unidad médica, donde fue operado en 2021. El papa parecía encontrarse relativamente bien de salud durante su habitual audiencia general del miércoles, aunque hacía muecas al entrar y salir del “papamóvil”.
Francisco perdió parte de un pulmón cuando era joven debido a una infección respiratoria y frecuentemente habla en susurros. Además, usa una silla de ruedas desde hace más de un año debido a una distensión de ligamentos en la rodilla derecha. Ha dicho que su lesión está mejorando y últimamente camina con un bastón.
El pontífice debe festejar el Domingo de Ramos este fin de semana, que da inicio a los oficios de Semana Santa: Jueves Santo, Viernes Santo, la Vigilia Pascual y el Domingo de Pascua el 9 de abril.