SALTILLO, COAHUILA. – En un mensaje conjunto los obispos de las diócesis de Saltillo, Torreón y Piedras Negras emitieron una reflexión sobre el próximo proceso electoral a realizarse en Coahuila, a partir de este domingo 2 de abril con el inicio de campañas.
El comunicado de los monseñores Hilario González García, Luis Martín Barraza Beltrán y Alonso Gerardo Garza Treviño señala que, en una época de enormes desafíos y oportunidades en todos los ámbitos de la vida social, “vemos que el bien común nos sigue pidiendo asumir de forma consciente y comprometida nuestras responsabilidades cívicas y políticas”.
Agrega que, por ello, en sinodalidad y por el bien común de la ciudadanía en el Estado de Coahuila, nos dirigimos a todas las personas que la conforman, sin distinción de credo, vocación, actividad, preferencia política o posición social, para animar a la más amplia participación ciudadana en el proceso electoral. Participar a través de nuestro voto es un derecho y un deber moral ineludible.
Y para quienes tenemos fe en Jesucristo, la participación en la política es una altísima vocación, una de las formas más preciosas de la caridad, porque busca el bien común; una caridad que es política porque supone el desarrollo de un sentido social que supera todo individualismo. Los discípulos de Jesús deseamos seguir su enseñanza de dar al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios (Mateo 22,21) cuando hacemos nuestro compromiso político.
Es preciso que todos ejerzamos nuestro voto de manera libre, secreta y en conciencia, entendiendo que cada voto cuenta. La democracia se consolida cuando todos participamos activamente.
Como Pastores sabemos que debemos iluminar y formar la conciencia a la luz del Evangelio, para que crezca la percepción de las verdaderas exigencias del amor de Cristo que nos apremia (2ª Corintios 5, 14). Exhortamos a toda la comunidad coahuilense a realizar un esfuerzo de discernimiento, con el objetivo de que, al momento de votar, se elijan gobernantes que puedan realizar el auténtico bien común; servidores públicos que respeten los derechos esenciales y que protejan a nuestras comunidades de la inseguridad; autoridades que realmente hagan una opción justa y fraterna por las personas vulnerables y por el cuidado de la casa común, con proyectos iluminados por grandes principios y pensando en el bien común a largo plazo, no sólo iniciativas inmediatistas. Que en todo esto tengan más acciones fecundas que discursos.
CRITERIOS SENSATOS
A los creyentes les animamos a colaborar desde su vocación laical para que los comicios se realicen de manera legal, ordenada, y pacífica. Los motivamos a visualizar criterios sensatos que ayuden a ejercer libre y responsablemente el voto. Es muy conveniente conocer la información disponible sobre las propuestas, programas, líneas de acción, valores de los candidatos en contienda política, así como su capacidad y talento para atender las necesidades de nuestro pueblo coahuilense con honorabilidad, coherencia y sensibilidad humana, y un compromiso real con una sociedad justa y equitativa.
Pedimos a todos participar de manera activa y consciente, para que en estas elecciones no gane el abstencionismo, ni la apatía e indiferencia cívica. Que nuestros ciudadanos se sientan libres para elegir y exigir a la futura autoridad. Todos somos responsables de promover la mejor política, aquella que es capaz de construir una sociedad fraterna y amistosa, en la que se tienden lazos y acuerdos sin fracturas, como bien enseña nuestro Papa Francisco.
Nuestra responsabilidad como cristianos y miembros de esta comunidad civil nos debe llevar al respeto de todos y no caer en el riesgo de fomentar o incurrir en descalificaciones irracionales, agresiones o actos de venganza, lo cual no construye la atmósfera que hoy necesita nuestra nación. Analicemos con serenidad los acontecimientos y recordemos que la democracia no termina emitiendo nuestro voto, sino que es necesario dar seguimiento a este proceso, exigir el cumplimiento de promesas de campaña y pedir la rendición de cuentas.
Es por ello que alentamos a todas las comunidades cristianas a que promuevan talleres y campañas de concientización, sin afanes partidistas y en fidelidad a la enseñanza social de nuestra Iglesia, para fomentar la ciudadanía y promover la más adecuada participación de todos en los próximos comicios y sean éstos una oportunidad para fortalecer nuestra identidad cristiana dando testimonio de unidad. Para construir la amistad social, la unidad debe ser superior al conflicto, debemos tender más allá de intereses particulares, y ningún partido o candidato debe estar por encima de la comunión y la paz en nuestras comunidades.
Invitamos a orar personalmente, en familia, en pequeñas comunidades, en las asambleas litúrgicas, por el próximo proceso electoral. En sintonía con la oración de Jesús, pidámosle que nos ayude a permanecer unidos a Él y asumir nuestras responsabilidades ciudadanas. Oremos unos por otros, para que los creyentes seamos ejemplo de participación ciudadana en las próximas elecciones.
Que santa María de Guadalupe interceda por nosotros para que podamos profundizar en nuestra fe y busquemos el progreso de nuestra patria por caminos de justicia y de paz. Que ella, madre del verdadero Dios por quien se vive y patrona de nuestra libertad, interceda por nosotros para que, por medio de nuestra activa participación cívica, coloquemos responsablemente los cimientos de un futuro mejor. (Con información de EL DIARIO)