A más de cinco años de que Marco Antonio Sánchez Flores desapareciera por cinco días tras ser agredido por elementos policíacos de la Ciudad de México (CDMX), cuatro agentes de la otra Secretaría de Seguridad Pública, fueron vinculados a proceso por distintos delitos al estar relacionados en este caso.
Martín de Jesús “N”, fue procesado por los delitos de abuso de autoridad agravado, lesiones y ejercicio ilegal del servicio público; a Juan “N”, por abuso de autoridad agravado y ejercicio ilegal del servicio público, mientras que Ricardo “N” y Hubel “N”, por el delito de ejercicio ilegal del servicio público.
En audiencia inicial, el representante social de la Fiscalía de Investigación de los Delitos Cometidos por Servidores Públicos formuló la imputación respectiva y un juez de Control fijó cuatro meses para el cierre de la investigación complementaria.
¿Qué le pasó a Marco Antonio Sánchez Flores?
De acuerdo con la indagatoria, el 23 de enero de 2018, Marco Antonio, en ese entonces de 17 años, quiso fotografiar un grafiti que estaba en un muro de la terminal de Metrobús El Rosario, ubicada en la avenida Cultura Norte, colonia El Rosario, alcaldía Azcapotzalco, cuando llegaron los uniformados, quienes aseguraron que pretendía robar.
El adolescente se asustó y corrió hacia el interior del andén, sin embargo, fue alcanzado y sometido violentamente para colocarle los candados de mano, por lo que resultó lesionado.
Durante cinco días, el paradero de Marco Antonio fue desconocido; el entonces estudiante de la Preparatoria 8 fue visto por última vez a bordo de una patrulla de la Secretaría de Seguridad Pública.
Fue hasta el 28 de enero de aquel año que apareció en el municipio de Melchor Ocampo, Estado de México. Cámaras de seguridad lo captaron actuando de manera errática y con lesiones en el rostro.