En los últimos años, la Liga Mexicana de Beisbol ha tenido un notable crecimiento en diversas facetas, pero sus dirigentes quieren más.
Horacio de La Vega, presidente del circuito de verano mexicano, dijo el miércoles que la meta para la temporada 2023 que inicia el jueves es prolongar el crecimiento sostenido que han tenido en las últimas campañas.
«Estamos en un momento único e importante, diría histórico porque nunca habíamos tenido tanta cobertura tanto apetito por el consumo de béisbol, especialmente en pretemporada», dijo De la Vega en una entrevista con The Associated Press.
De la Vega, quien como pentatleta participó en los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996 y Sydney 2000, tomó las riendas de la Liga Mexicana en 2019 de cara la temporada 2020 que no se disputó debido a la pandemia.
A partir de 2021, asegura que el crecimiento de ingresos por patrocinios ha crecido en un 700 por ciento, los ingresos por derechos de televisión un 600 por ciento y la cobertura se ha incrementado en casi mil por ciento.
«Tenemos más de tres contratos de televisión nacionales que no se tenían en 2022, además tenemos alcance en 30 países, algo que nunca había ocurrido», dijo el dirigente. «Eso no sería posible sin los dueños que han puesto dinero para traer peloteros de un alto perfil que genere más espectáculo».
La temporada pasada, de acuerdo con el dirigente, 4.3 millones de aficionados acudieron presencialmente a los estadios y De la Vega espera un crecimiento para este año de entre el 10 y 15 por ciento, pero sabe que esa cifra crecerá mucho más en 2024, cuando se sumen dos equipos más.
Bajo el mando de De la Vega, la Liga Mexicana tuvo una expansión en 2021 al sumar las franquicias de Mariachis de Guadalajara y Águila de Veracruz. El próximo año se sumarán dos más, una en Chihuahua y otra en Querétaro.
«Te comparto que la liga tenía tres o cuatro décadas sin expansión, se había mantenido estancada y ahora hay interés de varios estados por tener su franquicia, eso ha incrementado su valor al doble», añadió De la Vega, quien a su retiro como atleta trabajó como director del deporte en la capital del país.
El dirigente dijo que una de las estrategias que ha seguido es tratar de bajar la edad promedio del aficionado de Liga Mexicana. Compartió que cuando llegó, el porcentaje mayor era de entre 45 y 60 años, y ahora la edad promedio está entre 30 y 45.
Pero ha buscado también a la generación que viene detrás y creó una aplicación y contenido de transmisión libre (OTT) para que los más jóvenes consuman partidos y resúmenes desde cualquier plataforma y a la hora que lo requieran.
«Es un tema no menor lo que hemos hecho en televisión… Es algo que no se hacía, hemos entendido que la forma de consumir cambió. Ahora todos estamos en el celular y hacer eso nos da una permanencia más grande», agregó.
Hasta ahora parecen ir por buen camino.