CIUDAD DE MÉXICO.- El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, anunció que ayer se llevó a cabo la venta del avión presidencial, que fue adquirido durante la administración anterior y ha sido un tema polémico en el país.
El gobierno de Tayikistán depositó un total de mil 658 millones 684 mil 400 pesos, de acuerdo con el avalúo oficial, en la cuenta del Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado. López Obrador informó que el dinero será utilizado para la construcción de dos hospitales en Tlapa, Guerrero y en Tuxtepec, Oaxaca, que serán edificados por los ingenieros militares y se espera que estén listos antes de que termine su mandato.
El avión presidencial, un Boeing 787 adquirido en 2012 por el expresidente Felipe Calderón y estrenado por su sucesor Enrique Peña Nieto en 2016, ha tenido un costo total de 6,079 millones de pesos, de los cuales se han pagado 3,899 millones. Actualmente, la deuda pendiente con Banobras es de 2,180 millones de pesos.
Desde su adquisición, ha sido criticado por su alto costo y considerado un símbolo del derroche gubernamental en México. El actual gobierno de AMLO ha intentado venderlo desde que asumió el poder en 2018, pero no había logrado concretar una venta hasta ahora.
El presidente afirmó que la venta del avión presidencial es una muestra de la lucha contra la corrupción en el país y de su compromiso con el bienestar del pueblo mexicano. López Obrador ha prometido en varias ocasiones que el dinero obtenido de la venta del avión se destinaría a obras públicas, como hospitales, escuelas y caminos.
La construcción de los hospitales en Tlapa, Guerrero y en Tuxtepec, Oaxaca, serán llevados a cabo por los ingenieros militares, quienes tienen experiencia en proyectos de construcción en todo el país. La intención es mejorar el acceso a los servicios de salud en estas regiones, que han sido históricamente marginadas y que enfrentan graves problemas de salud pública.
El anuncio de la venta del avión presidencial y la inversión en hospitales ha sido bien recibido por algunos sectores de la sociedad mexicana, que han pedido que se utilice el dinero obtenido de la venta del avión en proyectos que beneficien a la población.