Hemos tenido acompañante de viaje cósmico y no nos hemos enterado hasta hace poco.
Urbantecno. Los descubrimientos de objetos celestes suelen ser el pan de cada día para astrónomos de todo el mundo, aunque en esta ocasión, según afirma el medio Space, parece que estamos ante una noticia de gran calado. Estamos hablando del descubrimiento de una cuasi-luna, es decir, de un cuerpo rocoso que sigue una trayectoria similar a la Tierra, acompañándola en su camino alrededor del Sol. ¿Similitudes y diferencias con nuestra Luna? Ahora te las contamos.
La nueva luna de la Tierra es 2023 FW13
En primer lugar, habría que aclarar que estamos hablando de un asteroide, no de aquellos tildados de potencialmente peligrosos, que ha sido bautizado como 2023 FW13 y que se ha ganado la denominación de cuasi-luna o cuasi-satélite. Y es que este cuerpo celeste parece que acompaña a nuestro planeta alrededor del astro rey, pero no acaba de ser atraído por su gravedad.
La información asegura que tiene un diámetro de 15 metros y que se encuentra a 14 millones de kilómetros de la Tierra. Por realizar una comparación con la Luna y poner algo de perspectiva, ésta tiene un diámetro de 3.500 kilómetros y está situada a una distancia aproximada, en el punto más cercano de su órbita, a unos 364.000 kilómetros de nosotros.
Ha sido gracias al telescopio de sondeo panorámico y sistema de respuesta rápida Pan-STARRS que hemos realizado la primera observación de este satélite en miniatura y, según la información publicada en el medio Sky & Telescope, su existencia ha sido confirmada también por el observatorio Canadá, Francia, Hawái y dos observatorios en Arizona, para finalmente acabar siendo aceptado como miembro de la Minor Planet Center at the International Astronomical Union.
Esta roca cósmica, que nos invita a conocer la diferencia entre un asteroide, un cometa y un meteorito, parece que nos acompaña desde el año 100 a.C. y que seguirá con nosotros, al menos, hasta el año 3.700 d.C. En anteriores ocasiones hemos conocido objetos similares, como el llamado Kamo’oalewa, que podría ser un pedazo de la Luna que se hubiese desprendido, pero ninguno tan grande como 2023 FW13.