Yuriria Sierra
¡Arrancan!
Estamos a pocos días de que suene la campana que oficialmente da inicio a la carrera en la pista de la 4T. No digo que morenista, porque en este espacio no se excluye a nadie. Los contendientes ya están calentando. Estiran brazos y piernas, están por colocarse en la línea de salida. Desde Palacio Nacional les han girado instrucciones. Hace meses les dieron un voto de confianza a todos, les dijeron que cualquiera puede llegar a la meta porque la pista está pareja. Pero a días de que se defina el proceso, a esta primera carrera rumbo al 2024, ¿cómo llegan los contendientes a.k.a. corcholatas? Antes de que arranquen el paso, aquí una breve radiografía, acompañada con datos de una de las últimas encuestas publicadas, realizada por Campaigns & Elections y difundida apenas el lunes pasado (y donde tampoco excluyen).
Claudia Sheinbaum. Ha sido señalada la “delfina” del Presidente, a estas alturas, esta cercanía podría jugarle en contra. Es momento de que engrose un poco la línea con el fin de exponer las diferencias que existen entre el mandatario y ella. Lo primero: reconstruir sus puentes con el movimiento feminista, porque sí es una lucha que debe figurar en un lugar preponderante en su campaña, pues, justamente puede convertirse en la primera presidenta de México. Además, tendría que insistir y subrayar su formación científica y lo que ésta proyecta para el futuro de México; así como poner sobre la mesa la urgencia del combate a la emergencia climática. Debe armar un discurso que resalte la idea de que la ciencia y los datos importan. En la encuesta: 43% de preferencias.
Marcelo Ebrard. El todavía canciller tiene que aprovechar su name recognition, esa cualidad suya que lo ha mantenido en el centro de la discusión, que lo hizo una figura relevante dentro de una administración que la política internacional. Él tiene las puertas abiertas y los puentes tendidos, tiene grandes posibilidades de llevar su proyecto más allá de nuestras fronteras a través del sector de las inversiones, para trazar la ruta que permita al país un rumbo sin turbulencias para la recuperación. Es capaz de lograr acuerdos y tratados y cuidar relaciones estratégicas, como la EU. Además, mantiene su figura como defensor de los derechos humanos, de las minorías, porque siempre ha sido un adelantado en estos temas. En la encuesta: 31% de las preferencias.
Adán Augusto López. Su cercanía con el Presidente fue un activo que le permitió reflector con mayor frecuencia, no lo ha catapultado a los niveles de las corcholatas antes mencionadas. Rumbo a la encuesta, debería apostarle a la reconciliación de los mexicanos, mandar un mensaje opuesto al de la polarización. Eso podría volverlo un candidato competitivo con los sectores con los que hoy se han abierto frentes y que no son pocos. Que se note que la continuidad de un proyecto no implica la continuidad narrativa. En la encuesta: 14% de las preferencias.
Ricardo Monreal. A pesar del trato, el senador es un viejo lobo de mar: conoce al Estado mexicano y a los actores, sin importar su partido. Ahí ha estado siempre su potencial, con todo y las jugadas en las últimas discusiones legislativas. Es un constructor de acuerdos y, aunque lopezobradorista y de izquierda, se ha fajado los pantalones para hacerle frente al Presidente cuando no está de acuerdo. No debe abandonar esa línea, debe insistir y robustecer esa figura que lo convierte en la pieza de la 4T que jamás se ha entendido como un aplaudidor. En la encuesta: 4% de las preferencias.
… y porque, insistimos, en este espacio no se excluye a nadie:
Gerardo Fernández Noroña. Seguirá el paso a Ebrard, aunque con enormes diferencias respecto a su name recognition, el diputado pedirá licencia para lanzarse con todo al proceso morenista. Tras la elección de Coahuila, ha recordado que él señaló que era un error del PT, el partido que respaldó su actual curul, no estar en alianza. Tuvo razón entonces, pero ahora ha convertido en el centro de su discurso el trato diferenciado respecto a las otras corcholatas. Debería primero tener un proyecto, no basta la camaradería con la que habla sobre la relación que tiene con su “compañero” Presidente. En la encuesta: 8% de las preferencias.
Así llegan a la línea de salida, el domingo sabremos qué otras condiciones deberán cumplir si es que quieren llegar a la meta.