Ignacio Moreira Loera
Se calcula que la edad de nuestro planeta ronda aproximadamente los 4,540 millones de años, sin
embargo se estima que la vida surgió tiempo después, hace 3,500 millones de años. A lo largo del tiempo, la tierra ha sido el hogar de innumerables especies de invertebrados, plantas, hongos, insectos, peces, mamíferos y un sin fin de organismos más y aunque parezca increíble, algunos paleobiólogos como David Raup estiman que es posible que hayan existido hasta 50 mil millones de especies distintas.
En la actualidad creemos que existen alrededor de 8.7 millones de especies; si comparamos esta cifra con los cálculos de Raup, podríamos decir que los seres vivos actuales representamos menos del 0.1% de todas las especies que han vivido en la tierra; esto significa que mas del 99.9% se encuentran ya extintas.
Gran parte de las especies que han desaparecido encontraron su final en las llamadas extinciones masivas, eventos en los que un gran porcentaje de la biodiversidad se extingue en un periodo relativamente corto.
En la tierra se han suscitado, hasta donde sabemos, cinco eventos de extinción masiva, el mas conocido es la extinción de los dinosaurios, un fenómeno ocurrido hace 65 millones de años al final del periodo
Cretácico, a causa de un asteroide de tan solo 10 kilómetros de diámetro que impactó en la Península de
Yucatán, desencadenando una serie de eventos geológicos y climáticos que acabaron con el 75% de la
vida en ese momento. Hoy en día, un sector de la comunidad científica ha teorizado, y con bastantes
pruebas, que una nueva extinción masiva se está gestando en estos precisos momentos, pero no por un
meteorito, sino por el humano, quien la está propiciando a través de la destrucción de los ecosistemas, la
contaminación atmosférica y el uso indiscriminado de los recursos naturales. A este nuevo fenómeno se le conoce como la sexta extinción masiva.
Desde el siglo XVI más de 680 especies de vertebrados se han extinto debido a las actividades del ser
humano. Actualmente, la actividad humana ha acelerado la tasa de velocidad de extinción, siendo hasta
10,000 veces más alta que la originada de forma natural. El reporte de desarrollo sustentable 2023 de las
Naciones Unidas proporciona datos alarmantes, hoy en día, 1 millón de especies de flora y fauna se
encuentran en peligro de extinción, la abundancia promedio de especies nativas en los principales hábitats se ha reducido en al menos un 20% desde 1900; mas de un tercio de los mamíferos acuáticos, así como el 33% de los corales y el 40% de la fauna anfibia se encuentran en peligro crítico.
Esta rápida desaparición de los organismos deja un vacío en los ciclos de los ecosistemas, al punto en que muchas especies fundamentales para la supervivencia humana, como la abeja, el atún, el plancton y otros animales y organismos vegetales, se encuentran gravemente amenazadas o al borde del declive total. Los incendios forestales, el tráfico de animales, el desperdicio de agua, así como la ganadería no sustentable son algunas de las causas que afectan a la naturaleza y por tanto a los seres humanos, quienes dependemos directamente de la salud del planeta tierra y de las especies con las que coexistimos.
Sin embargo, aunque algunos de los daños actuales son irreversibles, todavía existen innumerables
acciones para salvar nuestro querido planeta.
Si te interesa saber como puedes contribuir, te recomiendo
visitar la siguiente liga: https://www.fundacionaquae.org/wiki/como-salvar-planeta/
Instagram: @thewaxwingmra1