Alexis Massieu
Por el simple paso del tiempo, un adulto mayor se libró el día de ayer de una acusación de fraude por 300 mil pesos, la cual pesaba en su contra desde el año 2014, ordenando el juez que resolvió el caso, su inmediata libertad.
Tras ser detenido el pasado domingo, mediante una orden de aprehensión, José Mario “N”, compareció ante el Juez Abraham Guillermo Rodríguez García, quien analizó su caso, y llegó a la conclusión, de que, había transcurrido mucho tiempo desde la última audiencia en el año 2018, y que habiendo pasado 5 años, operaba por mucho, la prescripción de la acción penal.
Con un acusado, que por razones de la edad y de su condición de salud, se pasó buena parte de la audiencia dormido sobre su silla de ruedas, se debatió la resolución del juez, por parte del asesor de la víctima, Oscar “N”, y del Ministerio Público, alegando que ese juicio se había interrumpido, con un convenio celebrado entre los implicados, con el que finalmente no se cumplió.
El juez aclaró, que tras el intento del año 2016, donde otro juzgador dictó a favor de José Mario “N”, un auto de no vinculación a proceso, en el año 2018, efectivamente, se interrumpió la audiencia inicial, con motivo de un acuerdo reparatorio, el cual sin embargo, no le puso pausa alguna al tiempo legal, que siguió corriendo en perjuicio de la víctima.
Por esa razón, y respecto del supuesto fraude por 300 mil pesos cometido mediante un contrato, el 11 de junio del año 2014, nada queda por hacer, señaló el juez, salvo que una autoridad superior, le dé la razón al afectado, y obligue a José Mario “N”, a regresar una vez más al Centro de Justicia Penal.